Así fue la primera noche de amor entre Aimar y el Valencia

En la noche de San Valentín de 2001 se inició una historia de amor que Mestalla todavía no ha olvidado: la de Pablo César Aimar y el Valencia CF. Este martes se cumplen 16 años desde aquel 14 de febrero en el que un joven argentino se enfundó por primera vez la camiseta valencianista. Con apenas 21 años y sin horas de vuelo en Europa, saltó al terreno de juego para disputar un partido de Liga de Campeones en Mestalla y contra el poderoso Manchester United.

La camiseta le vino grande (le dieron dos tallas de más), pero el escenario no. Pese a la importancia del encuentro, Aimar jugó con una naturalidad impropia de un jugador de su edad, como si llevara años disputando partidos de Champions League y enfrentándose a los mejores equipos del mundo. Tan sólo necesitó entrar en contacto un par de veces con el balón para enamorar a Mestalla. El argentino desplegó un abanico de regates, caños y pases que pudo a la grada en pie.

"El recuerdo que tengo de esa noche es muy lindo. Fue el inicio de una linda etapa de mi vida"

"El recuerdo que tengo de esa noche es muy lindo. Fue el inicio de una linda etapa de mi vida", recuerda Pablo César Aimar en declaraciones al diario Levante EMV. El Valencia CF venía de ser subcampeón de Europa la temporada anterior y pagó 24 millones de euros por él en el mercado de invierno de curso 2000-2001. Antes de su debut las expectativas estaban por las nubes. La exigencia, también. Pero Aimar no decepcionó.

Y eso que la noche no comenzó del todo bien. Aimar se vio obligado a saltar al terreno de juego con una camiseta con una talla equivocada y un dorsal que no era el suyo. "El estadio estaba lleno. Había mucha gente, mucha expectativa, contra un gran equipo como el United. Recuerdo que tenía que jugar con la camiseta 35, pero me dieron la del número 22 por un error en la utillería o en la planilla, no lo sé. Al final me dejaron jugar con la 22, pero el resto de la Champions la jugué con el 35", recuerda Aimar 16 años después.

Aquel empate sin goles entre el Valencia CF y el Manchester United permitió a los de Mestalla avanzar en la competición, pero esa noche siempre será recordada por ser la primera de Pablo César Aimar como valencianista. Después de 16 años se recuerda aquel momento con la vitola de que cualquier tiempo pasado fue mejor, aunque el paso del argentino por Mestalla no fue un cuento de hadas.

Su época en el Valencia CF estuvo marcada por dudas constantes. El talento siempre está bajo sospecha y Aimar no fue una excepción. Al argentino siempre se le exigió más, aunque el paso del tiempo ha endulzado su recuerdo. Hoy Aimar es sinónimo de magia en Mestalla. Durante su paso por el Valencia CF dejó sobradas muestras de su talento.