Primeras detenciones por no usar mascarillas ni guardar la distancia de seguridad

Dos hombres de 45 y 52 años han sido detenidos por negarse a usar las mascarillas y a guardar la distancia de seguridad en un establecimiento de preparación de comidas del barrio de Altabix de Elche, según la policía local ilicitana. Los hechos ocurrieron ayer sobre las 21.40 horas cuando se recibió aviso de que estos dos individuos rechazaban las medidas de seguridad dictadas para combatir el coronavirus y, además, no querían abandonar el local en un tono agresivo y farruco.

La encargada del establecimiento explicó que había tratado de advertirles de las limitaciones de acceso y que los hombres respondieron "de manera altiva a escasos centímetros de su cara, haciendo caso omiso y accediendo al interior".

Dos hombres de 45 y 52 años han sido detenidos por negarse a usar las mascarillas y a guardar la distancia de seguridad.

A la llegada de los agentes, los dos hombres, posiblemente turistas que hablaban únicamente en inglés, reiteraron su negativa a abandonar el interior y a identificarse, lo que provocó que fueran detenidos por desobediencia y resistencia, uno de ellos tras una fuerte resistencia.

Pedagogía antes de sanciones

Las fuerzas policiales de la Comunitat han optado dese la semana pasada por desarrollar una labor pedagógica, más que por sancionar, en el primer día en que los ciudadanos mayores de 6 años están obligados a usar mascarilla en los espacios públicos donde no se pueda mantener una distancia de seguridad de dos metros. Las fuentes consultadas por EFE han señalado que en las primeras jornadas cuando entran en vigor nuevas medidas se intenta en general informar a la población y hacer advertencias si no se cumplen las medidas, más que ir directamente a sancionar, salvo casos que sean muy flagrantes. Asimismo, desde el Ministerio del Interior se ha indicado que, aunque el incumplimiento de esta obligación puede derivar en sanción, durante los primeros días se va a potenciar la función pedagógica por parte de las fuerzas de seguridad. Pero hay casos como el de Elche que necesitaron aplicar medidas más drásticas. 

Posibles multas

En ese sentiudo, si persiste o se encuentra un caso grave, se podrá proceder a realizar una propuesta de sanción por la vía del artículo 36.6 de la Ley de Protección de la Seguridad Ciudadana, en referencia el precepto de la denominada 'ley mordaza' que considera una falta grave penada con entre 600 y 30.000 euros "la desobediencia o la resistencia a la autoridad o a sus agentes en el ejercicio de sus funciones, cuando no sean constitutivas de delito".