Un Valencia muy setentero

Hacía mucho tiempo que el azar no emparejaba al Valencia CF y al Rayo Vallecano en una eliminatoria de Copa del Rey. Así es el capricho de los bombos que deparan la suerte y de los calendarios que, en apenas cosa de tres días obliga a repetir el choque entre valencianistas y rayistas en Mestalla. El primer envite se disputó el pasado sábado de Liga, y el segundo este martes de Copa. Sin embargo, hubo una época en que este enfrentamiento era una constante en el devenir del torneo del K.O.

La eliminatoria que los de Nuno intentarán cerrar este martes frente al Rayo Vallecano supone el cuarto enfrentamiento en la historia entre el Valencia CF y el conjunto del popular barrio de la capital madrileña en la Copa del Rey.
Para rememorar las crónicas de aquellos encuentros, hay que echar la vista atrás hasta la primera mitad de la década de los 70. Fueron tres temporadas consecutivas en las que valencianistas y rayistas tuvieron que devolverse las visitas a sus respectivos estadios en la ronda de dieciseisavos de final (Al igual que en la presente campaña).
La historia de los Valencia CF – Rayo Vallecano en la Copa se concentran en tres temporadas, en concreto en las comprendidas entre el 72 y el 75. En estos enfrentamientos siempre se impuso el Valencia con rotundidad y es exactamente lo que buscará el grupo dirigido por Nuno, hacer valer la renta de 1-2 que traen del partido de ida en Vallecas y no dar ninguna opción de remontada al rival como ya ocurriese el pasado sábado en el encuentro de Liga.
Durante aquellos años, el Valencia CF siempre consiguió la clasificación a costa del Rayo, sin embargo, el periplo copero de los valencianistas no se alargó mucho más, puesto que el equipo trasladó la dinámica mediocre liguera a la Copa y cayó eliminado en octavos a manos del Castellón, Las Palmas y el Sporting de Gijón. Este guarismo histórico es el que el Valencia CF intentará revertir en la presente campaña. Con un resultado caprichoso del sorteo que deja a los de Mestalla en la parte del cuadro contraria respecto a los equipos más poderosos. Además, y sin competición europea de por medio, la Copa del Rey pasa a ser prioritaria y los de Nuno no pueden dejar pasar una oportunidad de oro de llegar lo más lejos posible en una de las competiciones que más gustan al valencianismo.