El Atlético no puede con el Logroño
El Recoletas Atlético Valladolid cayó derrotado en el Polideportivo Huerta del Rey ante el Balonmano Logroño La Rioja (27-31), en un partido dominado por los visitantes durante muchos minutos gracias a su lanzamiento exterior pero que tuvo un tramo final emocionante en el que los gladiadores azules estuvieron cerca de remontar.
A los vallisoletanos les pesó mucho un mal primer tiempo en defensa (al descanso se marcharon con un 13-18 en contra) que se prolongó durante otros 10 minutos más en la segunda parte (17-25). No estuvieron cómodos ante un rival con una excelente continuidad en ataque y un lanzamiento exterior demoledor liderado por Scott Junior (nueve goles) e Imanol Garciandía (cinco). Los de David Pisonero no tuvieron capacidad de blocaje ni tampoco se arriesgaron con una defensa adelantada, lo que derivó en un lastre de goles que parecía ya insalvable.
El entrenador del Recoletas Atlético Valladolid sacó su as en la manga y, ya con nada que perder, se atrevió con una defensa 4-2 que cortocircuitó el fluido ataque del BM Logroño hasta ese momento. Los vallisoletanos fueron remontando (20-25 en el minuto 44) y se pusieron incluso a tres de diferencia a falta de siete minutos (25-28). Brillaron Adrián Fernández (siete goles) y Abel Serdio (ocho). Pero la amplia diferencia y las paradas de Sergey Hernández jugaron en su contra. Al final, los gladiadores azules no pudieron remontar, aunque se marcharon con la cabeza alta tras haber competido hasta el final ante uno de los equipos más fuertes de la Liga Asobal. En la lucha por el control del ritmo fueron los visitantes los que se llevaron la primera victoria y a la postre el triunfo final.
Superioridad desde el inicio
En el inicio los de Logroño defendían muy fuerte y provocaban varios errores en el Recoletas Atlético Valladolid que terminaban en goles fáciles a la contra. Cuando los locales controlaban esto, los riojanos mostraban un lanzamiento exterior muy potente, que tenía un gran acierto durante la primera parte gracias al francés Scott Junior (6 goles) y Garciandía (3). Los vallisoletanos sufrían mucho para frenarlos y un día más echaba de menos su defensa 5-1 con el ausente Miguel Camino de adelantado.
Así, pese a que Carlos Calle estaba muy acertado en la portería (ocho paradas en la primera mitad) y que Abel Serdio tenía balones en el pivote y también acierto (cinco goles), el BM Logroño La Rioja fue poco a poco escapándose en el marcador. Del 2-5 del inicio se pasaba a un 7-12 en el minuto 18 y luego a un 9-15 (minuto 22). Esos seis goles en contra comenzaban a pesar en los gladiadores azules, que veían como su rival no bajaba el pistón y aumentaba su confianza, sobre todo en defensa, con un Sergey Hernández que era protagonista en la recta final. Al descanso se llegaba con un 13-18 en contra para un Atlético Valladolid que iba apagándose.
Un querer y no poder
Una doble superioridad vallisoletana en el inicio de la segunda parte no servía para recuperar su desventaja y el encuentro entraba en una fase de equilibrio que no convenía a los locales (17-24, minuto 40). Sin embargo, un tiempo muerto de David Pisonero cambiaba totalmente el panorama del encuentro. Eso sí, instantes después los riojanos alcanzaban su máxima ventaja, ocho goles (17-25, minuto 42).
Pisonero apostaba primero por una defensa 5-1 y poco después por una 4-2 más arriesgada aún y con dos jugadores adelantados. Su objetivo era entorpecer la continuidad del BM Logroño con un hombre encima de su central, Balenciaga, y de sus laterales, y su apuesta salió bien. El Atlético Valladolid volvió a recuperar la valentía y la confianza, y, gracias a sus acciones defensivas, incluyendo un buen César Pérez bajo palos, podía recuperar balones y enjugar su desventaja (20-25, minuto 44).
Adrián Fernández, Víctor Rodríguez, Abel Serdio, Diego Camino y Dani Pérez llevaban gran parte del peso ofensivo durante este tramo. Los vallisoletanos llegaban a ponerse a tres goles con ocho minutos por jugarse (25-28). Sin embargo, pese al cambio de cara total la diferencia era grande, la eficacia de cara a gol no acompañaba. Sergey Hernández tenía sus mejores momentos en este tramo final y evitaba que el Atlético Valladolid llevara su remontada hasta el éxito.
Un gol de Dani Pérez a falta de cinco minutos aún daba opciones a los locales (27-30), pero en estos minutos no podía anotar más goles y el BM Logroño recuperaba de nuevo el control en ataque, con la presencia de Lazar Kukic y Juan del Arco, que daban la pausa necesaria para que los visitante se llevaran la victoria (27-31).
Ficha técnica
27 - Recoletas Atlético Valladolid: Diego Camino (2, 2p), Nico López (-), Héctor González (-), Roberto Turrado (-), Dani Pérez (4), Adrián Fernández (7), Rubén Río (1), César Pérez (portero), Carlos Calle (portero), Abel Serdio (8), Álvaro Martínez (-), Miguel Martínez (-), Roberto Pérez (1), Manu García (1), Víctor Rodríguez (3).
Siete inicial: Calle, Turrado, Dani Pérez, Río, Serdio, Manu García y Víctor.
31 - Balonmano Logroño La Rioja: Miguel Sánchez-Migallón (-), Vanja Ilic (6), Erik Balenciaga (1), Tomislav Kusan (3), James Edward Scott (9), Javi Muñoz (4), Balint Fekete (-), Tomás Moreira (1), Dariel García (-), Sergey Hernández (portero), Lazar Kukic (1), Juan del Arco (1), Edu Cadarso (-), David Cadarso (-), Imanol Garciandía (5), Claudio Leandro Ramos (-), Javier Romeo (portero).
Siete inicial: Sergey Hernández, Ilic, Balenciaga, Kusan, Scott, Javier Muñoz, Garciandía.
Parciales cada cinco minutos: 2-5, 6-7, 7-10, 9-13, 11-16, 13-18 -descanso- 16-21, 17-23, 20-25, 23-28, 27-30, 27-31.
Árbitros: Sebastián Fernández y Alberto Murillo. Excluyeron a Vanja Ilic (16’); Imanol Garciandía (29’, 50’), Tomás Moreira (31’), Adrián Fernández (34’), Javier Muñoz (35’), Miguel Sánchez-Migallón (57’).
Pabellón: Huerta del Rey (Valladolid). Jornada 23 de Liga Asobal. 2.018 espectadores.
