El Carramimbre no puede con el tercero
Fin a la racha de victorias con nuevas complicaciones de cara al play off. El Carramimbre Ciudad de Valladolid sucumbió (79-85) ante un enorme Liberbank Oviedo en un auténtico partidazo que bien podría haberse considerado propio de una eliminatoria por el ascenso. Los de Paco García, así, aún tienen tres partidos por delante para hacerse con un billete para la promoción.
De más a menos
El Carramimbre, consciente de que debe sumar otros dos triunfos lo antes posible y de que no puede dejar pasar las oportunidades en el Polideportivo Pisuerga, firmaba un inicio fulgurante. En un visto y no visto, los de Paco García alcanzaban una ventaja de ocho puntos (10-2) que eran capaces de mantener hasta los últimos tres minutos del periodo, cuando irrumpía Sergio Llorente para sostener a los suyos (17-10).
La entrada del base madrileño le cambiaba la cara al Liberbank Oviedo y sus 11 puntos en apenas cuatro minutos evitaban que se escapase el Carramimbre en los primeros compases. Desgraciadamente para los visitantes, en la recta final del primer periodo, Sergio Llorente se retiraba al banquillo debido a una lesión de tobillo, poniendo fin a 10 minutos de buen baloncesto en los que siempre dominaban los vallisoletanos (20-17).
A pesar de haber gozado de máxima a su favor, el Ciudad de Valladolid iba perdiendo fuelle a medida que los asturianos se iban asentando sobre el parqué de Pisuerga. Los de Javi Rodríguez, lejos de acusar la baja de Sergio Llorente, respondían desde el bloque y la anotación se repartía entre varios de sus efectivos, algo que también lograban los locales.
La segunda unidad de Paco García, así, resistía a los intentos del Liberbank Oviedo de estirarse, ya que por primera vez contaban con la iniciativa en el marcador (24-27), algo que se mantenía hasta el descanso. La verticalidad y la agresividad de cara al aro de los ovetenses provocaba que estos acudieran a la línea de personal en numerosas ocasiones y, al término de la primera mitad, se marcharan a vestuarios con su máxima renta (40-46).
La polémica hace acto de presencia
La igualdad era tal sobre el parqué, que ni siquiera en las estadísticas se apreciaban grandes diferencias (8-5 en asistencias y 20-19 en rebotes). En el plano individual, no obstante, sobresalían los 12 tantos de valoración de un Álex Reyes que había anotado ocho puntos, lo que le convertía en el líder de las ardillas en esa faceta.
Sin embargo, tras el paso por vestuarios, la mejoría que había experimentado el Oviedo Baloncesto se acrecentaba y los de Javi Rodríguez asestaban a los vallisoletanos un parcial de salida de 0-8 (40-54). Pero el Carramimbre, lejos de venirse abajo, salía reforzado de su máxima desventaja y comenzaba a remontar posesión a posesión.
El punto de inflexión llegaba con un triple y falta personal sobre Greg Gantt (16 puntos hasta entonces) que además acarreaba una técnica sobre Davis Geks, con lo que el Ciudad de Valladolid se metía de lleno en el partido después de no perdonar en los tiros libres (50-56). Y de hecho, la reacción podía ser total con otro triple y falta sobre el floridano, que, finalmente, no subía al marcador porque los colegiados interpretaron que el escolta había hecho flopping. La decisión, no obstante, encendía a un Pisuerga que empezaba a jugar un encuentro que encaraba los últimos 10 minutos con todo por decidir (58-62).
Los de Paco García, que habían dilapidado una desventaja de 14 puntos y enardecidos por su grada, tenían ante sí una oportunidad de oro de consumar la remontada y de sumar uno de los dos triunfos necesarios, a priori, para estar en la promoción de ascenso. Pero las cosas se complicaban aún más después de la enésima acometida de los asturianos (62-69 a falta de 7:10).
Sin premio final
A pesar del tiempo muerto solicitado por el técnico vallisoletano, la inercia no cambiaba para un Carramimbre al que cada vez se le ponía más cuesta arriba la contienda (66-76). Liderados por el experimentado Óliver Arteaga, los ovetenses continuaban mandando con puño de hierro, pero Álex Reyes aún no había dicho su última palabra. Ocho puntos consecutivos del alero obligaban a Javi Rodríguez a detener el partido (73-76 a falta de cuatro minutos) ante el vendaval que se le venía encima.
Y lo cierto es que entre el parón y una serie de decisiones polémicas de los árbitros, las ardillas se veían abocadas a encomendarse a la épica (75-83), pero el milagro no llegaba en el último minuto. Los de Paco García, así, terminaban sucumbiendo (79-85) y dejaban escapar una oportunidad de oro para sumar un triunfo vital en el sprint final por el playoff.
Ficha técnica
79 - Carramimbre CBC Valladolid: Óscar Alvarado (2), Greg Gantt (20), Álex Reyes (15), Jubril Adekoya (0), Seydou Aboubacar (4) -quinteto titular-. También jugaron: Mike Torres (2), Álvaro Reyes (-), Jonathan Kazadi (11), Daniel Astilleros (2), Sergio de la Fuente (16), Carlos Novas (7) y Bradley Hayes (0).
85 - Liberbank Oviedo: Roope Ahonen (9), Davis Geks (10), Steven Spieth (4), Rolandas Jakstas (9), Óliver Arteaga (15) -quinteto titular-. También jugaron: Bryce Douvier (6), Joey Van Zegeren (6), Víctor Ramos (-), Sergio Llorente (11), Ignacio Rosa (10), Alonso Meana (5) y Antón Bouzán (0).
Parciales: 20-17, 20-29 (40-46 al descanso), 18-16 y 21-23 (79-85 al final).
Árbitros: Uruñuela Uruñuela, Garvín Domingo y Aranzana García. Eliminado Roope Ahonen por cinco faltas personales.
