¿Quién es, realmente, Alberto Guitián Ceballos?

Desde hace unos días ya se sabía que Alberto Guitián era objetivo del Real Valladolid. Si desde ElDesmarque Valladolid anunciamos una llamada de Paco herrera para convencer al jugador, ya es oficial que tal mensaje del nuevo entrenador pucelano ha tenido resultado. El futbolista ya es jugador del club blanquivioleta con el que se une hasta el 30 de junio del año 2019. El canterano de Racing de Santander y Sporting de Gijón se convierte en el primer fichaje de la temporada 2016/2017 y marca el estilo y los objetivos del nuevo proyecto de Braulio Vázquez.

 

Salto al Sporting

Hablar de los inicios de la carrera del nuevo defensa del Real Valladolid es hacerlo de Racing de Santander, el equipo de su tierra. Natural de Los Corrales de Buelna, una pequeña localidad de poco más de 11.000 habitantes y a 32 kilómetros de la capital cántabra, el sueño de niño de Alberto Guitián estaba en los Campos de Sport de El Sardinero. Costó llegar hasta ellos y, pese a que aún tiene la espina clavada de no haber podido debutar en competición oficial con el primer equipo, el defensa central se muestra contento de su andadura en el Racing.
Diferentes aventuras en el equipo santanderino, con ascensos y descensos en su filial, terminaron en el año 2013. Una pérdida de categoría, por méritos propios pero, también, por el descenso del primer equipo, provocó su salida. Gijón le esperaba y lo hacía tras una llamada de Abelardo Fernández desde las Instalaciones de Mareo. El actual líder e ídolo de El Molinón confiaba en el potencial del jugador para su proyecto con el filial rojiblanco en Segunda División B.
Dos temporadas completas en el filial le hicieron dar el salto ahora hace un año. Con el ascenso del equipo y la prohibición de fichar para el equipo asturiano, Abelardo confió en el futbolista para llegar a la élite. Tristemente, esa confianza no se correspondió en minutos. Un mísero partido liguero y la participación en la ronda copera ante el Real Betis fueron el bagaje del jugador en Primera División. Con ella se terminaba su etapa de tres temporadas en Gijón. Llegaba el momento de buscar nuevos horizontes y hacerlo en Segunda División.

Confirmación zaragocista

Con un excelente bagaje en el filial asturiano pero una débil experiencia en el primer equipo, Guitián hizo las maletas el pasado mercado invernal. El Real Zaragoza, preso de una reforma de su vestuario, llamó a su puerta. Le ofreció un contrato de seis meses y la opción de luchar por llegar a Primera. La propuesta era bonita y atractiva, pero el camino no iba a ser sencillo.
La presión era muy exigente y el triste final de la temporada, sin posibilidad de play-off al perder (6-2) en Palamós ante una Unió Esportiva Llagostera ya descendida, obligaba a la salida del jugador, como a la de tantos otros compañeros. El fútbol no perdona días así y, pese al interés del club por prolongar su contrato, el futbolista ha hecho las maletas.
El ambiente en la capital aragonesa está enturbiado y el jugador, muy señalado tras ese partido, no se pensó en exceso su marcha. El recuerdo de aquel funesto partido es muy alto. El borrón de la derrota ha podido con un excelente bagaje de más de 1.500 minutos y de 17 partidos. Confirmado como un gran defensa central y olvidadas sus posibilidades como centrocampista, el cántabro firma tres campañas por el Pucela, con el objetivo de adquirir galones en el Nuevo Estadio José Zorrilla y poder vivir, por fin, una estabilidad en Primera a la que se llegaría con un ilusionante ascenso.

La base para el mercado

Con Alberto Guitián se cumple perfectamente el supuesto guión del nuevo Real Valladolid. Se ven nuevas directrices. Jugadores forjados en la categoría de bronce, que llegan a Zorrilla sin mucho nombre pero con un hambre terrible para crecer al ritmo del equipo, son el futuro. El ejemplo de lo que puede conseguir y en aquéllos en los que se puede fijar es alto. Marc Valiente, Mikel Balenziaga o Aritz Aduriz son algunos nombres en los que se puede mirar la primera piedra del proyecto de Paco Herrera.
Llegar con la aprobación del técnico catalán confirma la apuesta y le da estabilidad. El trabajo del preparador y de Braulio por verle de blanquivioleta, más aún. El Real Valladolid tiene su primer fichaje para la temporada 2016/2017 y éste es la base en la que se fijará para este mercado.