En el amplio mundo del SoloQ de LoL, existe un camino incluso más solitario que el resto. Un carril en el que nuestro desempeño es igual de fundamental, pero que no siempre se valora como debería, o relegado incluso a un arduo combate entre dos tanques que nunca se termina de decidir si no es por la colaboración del jungla o rotaciones de otros compañeros. Hablamos de una toplane que, oficialmente, es el rol que menos honor recibe en partida por un amplio margen con los demás.
Una estadística que realmente no sorprende a nadie, pues existiendo un carril en el que siempre se tiene un acompañante, salvo desastre y errores flagrantes del mismo, el honor siempre irá a parar a aquel que ha estado a nuestro lado. Sin embargo no es el carry y protagonista el rey del honor en League of Legends, si no que lo es el también a veces infravalorado apoyo.
👉 El orden de los roles de mayor cantidad de honor recibido a menor es el siguiente: Apoyo -> ADC -> Jungla -> Calle central -> Calle superior.
— League of Legends ES (@lol_es) August 14, 2020
El support es la posición que más honor recibe de media en partidas de LoL. No solo gracias al que le otorgue su ADC, si no posiblemente a las rotaciones que se pueda permitir en momentos puntuales al carril central o al pit del drake, aprovechando que el tirador continúa pusheando y recibiendo oro en solitario, lo que hace ganarse el favor del resto de sus compañeros.
En un papel mucho más directo en esto de las ayudas, y por motivos razonablemente obvios, el jungla es, tras el support y ADC, el tercer miembro que más honor recibe siempre en las partidas. Recibiendo el honor de cualquiera de sus compañeros en línea, pero sin poder competir con los favores mutuos en la botlane. En penúltimo lugar, el siempre presionado midlaner tampoco parece recibir el premio que se merece en cuestión de honor (siempre hablando con respecto a la media), aunque por encima de un toplaner que, para encontrar al campeón con más honor en esta posición nos tenemos que ir al puesto 53º, en el que Shen tiene el dudoso privilegio del trono del carril superior.