La repercusión de cualquier vestigio novedoso en las arenas de Brawl Stars cambia las estrategias para afrontar cada uno de los mapas del juego y, con Halloween presente entre fantasmas, el último modo despierta a los jugadores de Tick para poner en marcha una jugada espectacular con su ultimate.
Las herramientas de un brawler como Tick son relativamente limitadas teniendo en cuenta sus capacidades para hacer daño, una bestia a larga distancia para controlar zonas del mapa, bloquear ciertos espacios con su básico y una bomba de relojería en forma de ultimate.
Precisamente es ese gigantesco botón amarillo el que salva continuamente al personaje de los ataques a melé en la mayoría de los casos, pero a veces la originalidad por ir más allá se superpone en movimientos tan radicales como este hasta lograr una especie de teletransporte para ir más allá.
En el mapa especial de Supervivencia en homenaje a Halloween, el modo fantasma se apropia de las partidas como esta en la que la sobriedad es protagonista, un cuidado extremo con el que este Tick utiliza la ultimate para que tome impulso de una manera inverosímil.
Sin apenas ángulo de visión para verlo, Piper se come una ultimate de Tick que toma una de las plataformas naturales de la partida hasta ver cómo se acaba su vida, algo muy difícil de hacer que el usuario consigue lanzando directamente la habilidad sobre el agua.
Tick no tiene ni mucho menos ese alcance como para mandar tan lejos su habilidad, pero la permisividad del agua le da un plus para llegar algo más lejos, superar esa barrera y convertirse en el MVP de una jugada que perfectamente podremos utilizar en todo tipo de mapas con partes acuáticas.
La innovación en este tipo de mapas de Supervivencia es necesaria en todos los casos para conseguir más trofeos, pero en este caso es incluso más importante teniendo en cuenta que en el modo fantasma vamos perdiendo vida poco a poco aunque no hagamos nada en el mapa, por lo que la jugada es perfecta.