El resumen de Brawl Stars en 2020: 11 brawlers, 45 skins y el Starr Park
El primer año de Brawl Stars fue una sorpresa en el apartado de los videojuegos móviles y el segundo ha sido la confirmación de que detrás hay uno de los mejores equipos de desarrollo en la industria marcado por la inteligencia, el feedback con la comunidad y el carisma detrás del lore, sin duda los tres puntos fuertes de el 2020.
La fase de evolución de Brawl Stars a lo largo de este maldito 2020 envuelto en la pandemia deja una de las mejores reflexiones posibles en un videojuego móvil creado para entretenerte en esos ratos muertos del bus, pero se ha convertido en algo mucho mayor.
Ese 3v3 que nació a finales de 2018 parecía ser una prolongación del carácter innovador con el que Supercell ya sorprendió años antes con Clash Royale, otro estilo en el modo de juego pero una misma línea para asentarse como uno de los núcleos de los videojuegos en móvil...y acertaron por completo.
Con una libertad creativa cada vez mayor, Brawl Stars ha conseguido en 2020 dar un salto gigantesco que tiene en su fuerte el desarrollo del meta con la creación de brawlers, mapas y modos de juego, pero la realidad es que es en la expansión de su universo donde ha dado el salto definitivo.
La creación de personajes es una constante en todos los videojuegos del estilo y normalmente es una lanzadera habitual que conjuga con el gancho hacia la comunidad, pero en este caso esos 11 brawlers y 45 skins se han adaptado al verdadero secreto del juego, formar parte de la comunidad desde los pequeños detalles.
Ese gusto por dar un paso más en la concepción de los entornos, de las historias y de los puzzles internos en cualquier cinemática o diseño lo ha apropiado la comunidad desde el momento en el que se multiplicaban, algo con lo que se ha llegado a crear algo tan adictivo como el entorno del Starr Park o la WKBRL Radio 24/7.
Las dos ideas y la puesta en marcha de los vídeos y de los pequeños detalles como la página web con los elementos, las pistas ocultas, los minijuegos con streamers y detalles como el minijuego de 8-bit son un plus que da el salto más allá de lo que tenemos dentro de la app, y eso se agradece.
El resultado está en la última Brawl Talk de diciembre, casi un millón de jugadores concurrentes que se multiplicaron unos días después los servidores estallaron el momento en el que todos intentamos conseguir a Edgar de manera gratuita en la tienda.
Solamente con esa idea Brawl Stars y todo su equipo de desarrollo ha demostrado en un solo año que el crecimiento exponencial de una marca puede ir a más sabiendo manejar las historias, escuchando a la comunidad y explotando todo su potencial con multitud de novedades: los desafíos especiales, el Brawl Pass, las misiones diarias, el Creador de Mapas, el lanzamiento en China, los emoticonos y los nuevos gadgets.
Si en su segundo año han sido capaces de desarrollar todo eso con un escenario ascendente, más ganas tenemos de ver en qué pueden crecer a partir de un 2021 que se expone como un año ilusionante tanto para creadores como para jugadores.