El regreso del League of Legends competitivo a Europa en forma de LEC ha recuperado el hype del fichaje de Rekkles por G2 como si se hubiera realizado hace solo unas horas, un inicio soberbio del sueco para demostrar con un 25/1/22 que en solo tres partidas los fans ya pueden calmarse pensando en los Worlds 2021.
El hambre de la afición europea por soñar con un campeón renace cada temporada con la ilusión de una nueva plantilla, un meme que se repite cada año con G2 Esports y que en este caso tiene a Rekkles al frente liderando un equipo capaz de todo a pesar de la marcha de Perkz...que se lo digan a sus rivales después del 3-0 inicial.
Entre la conexión con Mikyx, el estado de forma del support como posible MVP del primer fin de semana de LEC y la felicidad del propio ADC ex de Fnatic más allá de las partidas encierran un ambiente perfecto para soñar, aunque de momento solo le hayamos visto contrlando a Sivir y Jhin. Estas han sido las tres partidas:
En el aspecto más social era difícil en los últimos años encontrar a un Rekkles risueño delante de la cámara o con sus compañeros, un cometa puntual que en los primeros días de G2 Esports parece ser una constante, algo que habla de cómo se ha asentado a la organización de Ocelote.
Las estadísticas en la grieta junto a las sensaciones en partida son el ejemplo perfecto de cómo esa sonrisa se personifica en la figura del sueco en varias fases de la partida, pero sobre todo en el ambiente festivo de G2 en los documentos para redes sociales tras las tres victorias.
Caps recaps our 3-0 @LEC Superweek with @RekklesLoL!
Also, an exclusive MARTIN RANKING update from @G2GrabbZ! pic.twitter.com/haL3ZFP5WI
— G2 Esports (@G2esports) January 24, 2021
Con el inicio arrollador de G2 Esports se abre el debate sobre quién llevaba realmente el peso de Fnatic en las últimas temporadas, si de verdad los samuráis son capaces de mejorar sin Perkz el nivel de los dos últimos años o si verdaderamente pueden conseguir los Worlds. Obviamente en solo tres días es imposible responder a nada más que a una bola de hype con mucho por responder, pero la amenaza para dejar huella en una temporada histórica está presente.