Las probaturas en un juego como Clash Royale con más de 100 cartas son necesarias para redescubrir el meta según el rango de copas de cada jugador, una experiencia única a veces encubierta por el top tier con un escalado único más allá de los niveles de cada tropa para encontrar situaciones top por ejemplo con la madre bruja.
La madre bruja es una de las cartas más olvidadas del meta de Clash Royale desde su aparición y aunque pasó por picos de poder, actualmente no está cerca de colarse en los mazos más poderosos con el paso de las temporadas, pero eso no quita que si se utiliza bien su poder pueda ser incontestable.
Su capacidad para combatir contra mazos de ciclado o logbait es muy interesante en momentos puntuales y a veces es capaz de llenar la mesa de puercos sin que el rival sea consciente del gasto de elixir por alguna de las dos calles, lo que da una libertad total para manejar las oleadas sin apenas lanzar cartas.
Ese punto se exagera en este gameplay único donde un jugador es capaz de convertir hasta 15 tropas enemigas en puercos que atacan a la propia torre del enemigo, una jugada hasta ahora nunca vista con una explicación necesaria para entender el daño realizado.
La clave está en el lanzamiento de cartas defensivas alrededor de la torre en vez de en la posición de la bruja madre, porque simplemente con colocar a un personaje en el puente el push finaliza después del caos inicial, pero en este caso se premia la espectacularidad.
Obviamente este tipo de jugadas es posible con la madre bruja y de hecho se debería potenciar su uso ante la mayoría de mazos actuales donde brillan los espíritus de fuego, o los esqueletos en tanto mazo de ciclado, pero en este caso es un bait gigantesco que aún así deja muy buenas sensaciones sobre lo que puede llegar a hacer el personaje.