No hay perdón para Maxi

El Comité de Competición ha fallado en contra del Celta y no ha retirado la segunda cartulina amarilla a Maxi Gómez. Las alegaciones de los servicios jurídicos del club no han convencido al organismo federativo y el Celta deberá acudir al Comité de Apelación para intentar que el delantero uruguayo pueda estar presente en el trascendental partido contra el Levante.

El Celta basó su defensa en asegurar que el acta redactada por el colegiado asturiano, González Fuertes no reflejaba lo que había sucedido en el campo. El árbitro mostró dos cartulinas amarillas al delantero uruguayo de manera consecutiva alegando que la segunda era por "haber aplaudido en señal de disconformidad" una decisión suya.

En las imágenes se mostraba como esos aplausos se habían producido antes de recibir la primera cartulina amarilla, por ello el Celta entendía que la segunda amarilla, tal como esta expuesta en el acta arbitral no tenía cabida ya que se estaría sancionando el mismo hecho dos veces.

El Comité de Competición ha expuesto que "Las alegaciones formuladas deben ser desestimadas, en cuanto el acta del encuentro refleja con claridad dos hechos diferentes, cada uno de los cuales es sancionado con una tarjeta amarilla. El primero, el mostrar disconformidad con una de las indicaciones del árbitro, que constituye la infracción tipificada en el artículo 111.1.c) del Código Disciplinario de la RFEF; y el segundo, lo que claramente constituye una actuación distinta, aplaudir al árbitro en señal de disconformidad, que constituye una infracción tipificada en el mismo precepto".

Por ello desde el organismo federativo se asegura que  "no entiende este Comité que estemos ante una misma conducta continuada, si no ante dos hechos diferentes y sucesivos, objeto de la correspondiente sanción cada uno de ellos, y por ello no se aprecia vulneración del principio “non bis in ídem”.

De esta manera el Comité de Competición acuerda "suspender por UN PARTIDO al jugador del Real Club Celta de Vigo, D. MAXIMILIANO GÓMEZ GONZÁLEZ, por doble amonestación arbitral y consiguiente expulsión, ambas por formular observaciones o reparos al árbitro principal, con multa accesoria en cuantía de 350 € al club y de 600 € al futbolista, en aplicación de los artículos 111.1.c), 113.1 y 52.3 y 4 del Código Disciplinario de la RFEF". El Celta presentará ahora un recurso al Comité de Apelación para intentar poder contar con el delantero uruguayo ante el Levante.