El técnico deja abierta la puerta a las rotaciones

Fran Escribá, entrenador del Celta de Vigo, ha dejado abierta la puerta a los cambios en su once para enfrentarse al Real Madrid en el Santiago Bernabéu: "Siempre es posible que haya algún cambio, tengo que pensar en el grupo porque luego llega una semana con tres partidos muy seguidos". Aunque el técnico quiso dejar claro que estos cambios no tendrán que ver con los futbolistas que están al borde  de la suspensión por amarillas.

"El único partido que importa es el de mañana, que tiene una dificultad muy grande, pero de entrada la idea para este partido es que las tarjetas no nos condicionen", explicó Escribá que sí dejó la puerta abierta a reservar a alguno de los jugadores al borde de la sanción "dependiendo del transcurso del encuentro".

El técnico reconoció que quiere mantener en alerta a sus jugadores: "No quiero que ellos tengan la  sensación de que hay un once y que es inamovible". Sobre este punto el valenciano confesó que le asaltan las dudas entre alinear a quiénes están en mejor momento o quiénes tienen mayor aplomo para afrontar la situación actual que vive el Celta.

"Hay veces que en determinados momentos uno tiene a disposición a los 11 que cree que están mejor, pero hay otros que aportan algo que hace que los demás mejoren" debido a su jerarquía y experiencia sobre el campo.

Fran Escribá está convencido que "habrá jugadores que van a dar ese paso adelante" ya que cree que "siempre que hay un cambio de técnico todos quieren dar lo mejor, pero cuando uno va a jugar contra el Real Madrid a lo mejor lo anulas porque aparece otro".

Por ello reveló que pensar "en uno u otro no me va a solucionar todo". Por último, ante la obligada baja de Mallo por lesión, Escribá reconoció que "la opción más natural para sustituirlo es Kevin". Sobre el canterano el técnico destacó que "es un ejemplo, siempre entrena a tope y siempre está más que preparado para cuando le toque  salir". Para Escribá Kevin "está preparado para jugar".