Un ping-pong atípico y una colección de guitarras: Rafinha muestra sus otros talentos
El encierro obligado para tratar de frenar la expansión del coronavirus COVID-19 está sacando a relucir capacidades menos reconocidas en los jugadores de fútbol. Música, otros deportes, o incluso críticas de cine y series. Las horas libres permiten a la imaginación volar e inventar nuevos juegos. Así nos lo ha mostrado Rafinha Alcántara recientemente, haciéndonos saber que no sólo tiene talento para jugar en el Celta de Vigo, sino que sus pasiones van más allá del balompié.
Ha publicado un vídeo en sus stories en el que aparece jugando al tenis de mesa (popularmente conocido como ping-pong) junto a otro chico. Pero no a uno cualquiera: ha mezclado el típico juego con palas con el béisbol, ya que se pasan la pelota el uno al otro rebotándola en la mesa y la recogen con un guante de catcher o receptor. La imaginación vuela cuando tenemos la mente en funcionamiento y al jugador del Celta se le ha ocurrido esta ingeniosa manera de matar las horas.
Haciendo un repaso a su perfil de Instagram, no era difícil saber que al hispano-brasileño le gusta tocar la guitarra y hace sus pinitos en el mundo de la música. Pero nunca antes había mostrado de forma tan directa su colección de instrumentos: cuatro guitarras, dos eléctricas y dos acústicas. Un rincón de su casa está ocupado por ellas y, según lo publicado por Rafinha, son más que suficiente compañía para pasar el confinamiento por el coronavirus. "'Elas' (ellas). #IStayHomeWhithThem (me quedo en casa con ellas)", reza el mensaje que acompaña a la foto de las guitarras.
Entre los chistes de Denis Suárez y Nadia Avilés, los juegos de Iago Aspas con su hijo Thiago a ritmo de Rianxeira y las ideas del community manager del Celta para entretener a sus seguidores, las horas de encierro se pasan de forma mucho más amena.
