Coudet: "No hay techo, siempre se busca mejorar"
Eduardo Coudet se mostró satisfecho por lograr la cuarta victoria seguida en Liga con el Celta de Vigo. El entrenador argentino, aún así, mostró su cautela, asegurando que hay que seguir trabajando y mejorando porque "nunca hay techo". Siempre exigente el Chacho lamentó que los suyos no pudiesen cerrar antes el marcador ante un Deportivo Alavés peleón.
Con cuatro victorias consecutivas una pregunta era obvia, dónde estaba el techo del Celta que ahora dirige. Coudet señaló que "siempre se busca mejorar y nunca hay techo". El entrenador se apuntó a la teoría del partido a partido: "Hay que prepararse para cada juego y no mirar para atrás ni más allá del próximo juego. Prepararse para lo que viene".
El Chacho apuntó que toca seguir centrados y trabajando al máximo: "Ahora podremos disfrutar un rato más y mañana empezar a prepararnos el partido del Getafe, el miércoles, va a ser un partido durísimo" ya que estas Navidades LaLiga no para y el Celta se medirá al conjunto azulón el 23 de diciembre.
"Hay que seguir trabajando. No nos podemos quedar con lo que hicimos, si no apuntar a lo que va a venir. En este caso, pensar, pura y exclusivamente, en el partido del miércoles", continuó Coudet, que ante el Getafe podría igualar la mejor racha del Celta en su historia en Primera División, la lograda por Víctor Fernández en 2001.
Centrado en el análisis de la victoria ante el Alavés, Coudet lamentó que "en el primer tiempo tuvimos muchas situaciones como para cerrarlo, salvo un error que tuvimos de salida en el inicio" aunque quiso poner en valor la solidez defensiva del equipo al destacar que "no nos han pateado en el primer tiempo".
Reiteró que no tuvieron el acierto para poder cerrar antes el encuentro: "Tuvimos muchas situaciones que, si bien no ha tapado el portero nos faltó la terminación justa para hacer el segundo gol en el primer tiempo y salir con mayor tranquilidad" lo que provocó que en la segunda mitad el Alavés fuese a por el empate con mayor determinación.
Sobre ello Coudet expuso que "estuvimos más acelerados con el balón, queríamos ir muy directos a tratar de hacer el segundo gol" lo que provocó "diez minutos donde tenemos que sufrir un poco, no tanto por las llegadas, si por el resultado al estar solo diferencia de un gol". Esa escasa diferencia en el marcador se reflejó en que "no podíamos encontrar la calma para sostener la tenencia. Después, nos acomodamos bien y cerramos con el segundo gol".
El esfuerzo y la identificación del celtismo
Hasta el momento Coudet está apostando por una rotación escasa y el calendario se aprieta con muchos partidos en pocos días. Preguntado por el cansancio que pueden acumular los jugadores, el argentino señaló que "es un gran esfuerzo que están haciendo los jugadores, pero no es un esfuerzo momentáneo, es una idea, una forma de jugar".
"No podemos dejar de tener este sacrificio, esta solidaridad. El día que no lo hagamos, nos vamos a traicionar, esa es la realidad" y traicionar a una afición que ahora se siente identificada con el esfuerzo y trabajo de sus jugadores. "Eso es lo que más nos llena, y ganar, que es lo más lindo", concluyó.
