Agné vuelve a la que fue su casa

Raúl Agné volverá en Cádiz a una de las localidades en las que entrenó antes de llegar hace unas semanas al banquillo del Real Zaragoza. El técnico aragonés vivió dos temporadas en el Ramón de Carranza -ambas incompletas-, en una experiencia que recuerda con el sabor amargo de no haber logrado el ascenso a Segunda.

Aunque lo cierto es que Agné llegó a la localidad andaluza como el especialista en salvar situaciones complicadas en el que se ha convertido en los últimos tiempos. El mequinenzano tomó las riendas del Cádiz en la jornada 17 de la temporada 2012-13, un equipo que ya sumaba por entonces dos entrenadores, Monteagudo y Ramón Blanco, y que apenas había sumado 16 puntos en otras tantas jornadas. Pese a estrenarse con derrota por 0-1 ante el Jaén, Agné fue capaz de enderezar el rumbo del equipo para lograr, al menos, la salvación, tras sumar 38 puntos a final de temporada, suficientes para dejar atrás promoción y descenso que quedaron a cinco y siete puntos respectivamente.
La temporada siguiente se marcaron nuevos objetivos, los de Raúl Agné tenían el ascenso entre ceja y ceja. Con una plantilla renovada en la que, por cierto, estaba el exzaragocista Jorge López, en los últimos estertores de su carrera. El equipo se mostró arrollador en el inicio de la competición y durante algunas fases de la temporada, con goleadas como el 1-6 al Écija, el 4-0 al Albacete o el 5-1 al Melilla. Sin embargo, no era suficiente y tras 30 jornadas, el equipo tan solo era 5º en la tabla con 51 puntos, a cuatro de los puestos que daban derecho a luchar por el ascenso. Un 3-0 ante el filial del Almería fue la gota que colmó la paciencia de la directiva gaditana, que decidió sustituir al aragonés y poner en su lugar a Antonio Calderón, que años atrás había liderado con éxito el primer proyecto en Segunda del Huesca.
El entrenador gaditano enlazó las últimas ocho jornadas sin perder, para meter al Cádiz en una promoción en la que caería ante L'Hospitalet. Se diseminaba así la huella de un Raúl Agné al que la gloria se le negó en el Cádiz.