La intensidad polaca no puede con el Real Zaragoza, que pasa de ronda (1-4)

El Juvenil del Real Zaragoza ha conseguido pasar de ronda en la primera eliminatoria de la UEFA Youth League. En un intenso partido frente al Korona Kielce, en el Suzuki Arena, los de Iván Martínez han conseguido hacer valer el 1-0 de la ida, venciendo de forma contundente por un 1-4.

El conjunto aragonés contaba con dos bajas importantes. Francés y Carbonell no podían estar hoy con el equipo. El primero porque se encuentra ya concentrado con la Selección Española sub-17 para el Mundial de Brasil. Y el segundo por sus molestias musculares. Pese a ello, los blanquillos han dado un recital de fútbol.

Bien pronto, los locales mostraban cuál iba a ser su estilo. A base de faltas, los polacos querían pausar y ralentizar el juego de los aragoneses. Al cuarto de hora, esa brutalidad se iba a traducir en la expulsión de Oskar Sewerzynski por doble amarilla. Se quedaba con uno menos el conjunto local.

Desde entonces, la balanza comenzaba a decantarse hacia el lado blanquillo. El dominio comenzaba a teñirse de azul y blanco, y las ocasiones empezaban a llegar. Primero era Juan Sebastián. Después, Sancho. Pero...

Se adelantaban los polacos

Ante el asedio zaragocista, un error defensivo iba a provocar que fuera el conjunto local el que abriera la lata. Lisowski aprovechaba la ocasión y batía a Acín por bajo. La eliminatoria se igualaba entonces a uno.

Los de Iván Martínez no iban a asustarse con eso. La idea era la misma: jugar como bien saben. Poco a poco, el Korona, lógicamente, iba retrocediendo líneas y el Real Zaragoza lo iba a aprovechar. En un balón aéreo, Iván Azón controlaba el esférico para ponerla donde no podía llegar el meta local y hacer así el empate, instantes antes del descanso.

Ya en los segundos 45 minutos, la tónica iba a ser la misma: demasiada intensidad por un lado, que no podía detener el juego del otro. El Real Zaragoza quería más. Y así lo demostraba Castillo, reventando el palo de la portería local con un latigazo que no era gol por centímetros.

Llegaba el segundo gol, el de la tranquilidad

Sin embargo, Iván Martínez no se fiaba ni de que sus chicos se estuvieran mereciendo más, ni de que el Korona llevara una hora con 10. Por eso, el conjunto aragonés subía una marcha, y seguidamente el segundo gol. En una magnífica jugada colectiva, Iván Azón mareaba al defensor polaco y al darse la vuelta, definía con sutileza al costado del palo para hacer su doblete y darle un respiro a su equipo.

Aunque los de rojo y amarillo no iban a darse por vencidos tan pronto. Ya no tenían nada que perder y se lanzaban al ataque. Acín, nuevamente, sacaba varias manos de mérito para evitar que los polacos volvieran a meterse en el partido.

Iván Martínez veía como se habían venido arriba enseguida los locales y decidió parar esa motivación con los cambios. Jay, Vela y Marvin Kombe ingresaban para disfrutar de los últimos minutos. Y uno de esos hombres iba a acabar siendo también protagonista.

Vela y Castillo sentenciaban al final

Cuando quedaba poco más del descuento, tras un centro lateral y un rebote, Vela marcaba el tercero. Cabezazo ajustado al palo dentro del área pequeña, al que no podía llegar el arquero. Finiquitaba el conjunto zaragozano cualquier mínima esperanza local para remontar.

Nula era la esperanza polaca, que llegaba el cuarto. Falta lateral, ya en el descuento, colgada al área que remataba cruzada Castillo para hacer el cuarto y poner fin al partido.