El calvario de Vigaray
Carlos Vigaray vive inmerso en un prolongado calvario en forma de lesiones. El pasado sábado, en el partido del Real Zaragoza ante el Albacete, también terminó con problemas en sus isquiotibiales. De momento, Vigaray está pendiente de evolución para conocer el alcance de las molestias. La mala suerte se ceba con el lateral blanquillo.
Vigaray recae de sus problemas físicos https://t.co/mv5G5th0Ld #RealZaragoza
— ElDesmarque Zaragoza (@ElDesmarque_ZGZ) November 17, 2019
La continuidad es algo que no ha podido disfrutar Carlos Vigaray desde su llegada al Real Zaragoza. El zaguero acumula un total de nueve partidos, en los que ha conseguido anotar un gol. No obstante, se ha perdido otros ocho por sus problemas físicos. Primero, no compareció en los duelos ante el Real Oviedo y el Málaga. Después regresó para disputar 22 minutos frente al Cádiz, pero volvió a lesionarse. Fueron otros cinco partidos de baja: ante Numancia, Fuenlabrada, Sporting de Gijón, Mirandés y UD Las Palmas. Su reaparición fue ante el Almería, disputando todo el encuentro, algo que repitió en la visita del Albacete.
Sin embargo, la suerte le volvió a ser esquiva y terminó el partido con molestias, aunque aún no se conoce el alcance exacto de las mismas. La temporada de Vigaray está siendo similar a la de hace dos años en el Deportivo Alavés, donde las lesiones también se convirtieron en su calvario.
Allí cayó lesionado en dos ocasiones. Cuando parecía que estaba muy cerca de regresar tras la primera, volvió a sufrir un traumatismo en la rodilla que lo terminó de lastrar, convirtiendo el año en un infierno. Con paciencia y cuidado consiguió recuperarse, un camino que también debe tomar este año para que las lesiones no puedan con un jugador muy prometedor en defensa.
Del primer párrafo: "La mala suerte se ceba con el central blanquillo." Yo creía que Vigaray es un defensa lateral derecho que, circunstancialmente, en caso de necesidad, puede jugar de defensa central. Pero si El Desmarque dice otra cosa, será verdad y seré yo el equivocado. En cualquier caso, esperemos que no sea nada importante y que, con un poco de descanso, Vigaray se recupere y esté en condiciones de jugar el próximo partido sin que ello suponga asumir riesgos de una recaída.