Cuando ser el mejor en el fútbol no es lo más importante

El Celta tiene una gran cantidad de escuelas repartidas por el mundo, la última parada es en Estados Unidos, en ellas se intenta enseñar a los niños las claves del mundo del fútbol. Los vigueses organizan los campus " RC Celta Soccer Academy", este es el primer paso para establecerse de forma definitiva en el país de las barras y estrellas. Pero hay otra escuela, en Perú, que es distinta, en ella no prima la pelota, lo que importa es ayudar a unos niños en riesgo de exclusión social.

 
Un proyecto solidario el de Paita, que sustituye al de Puerto Delgado en Argentina. Así lo contaba Germán Arteta para La Voz de Galicia: "Hemos abierto hace un mes la de Paita. Es una escuela más de corte social para los chicos de esa ciudad que están un poco en riesgo de exclusión social. Queremos acogerlos, mantenerlos fuera de la calle y a la vez poder llevar una vida lo más saludable posible con el deporte. En este caso el ámbito deportivo es más secundario", confesaba en las páginas del periódico gallego.
En la escuela de Paita está al frente un técnico que se ha formado en A Madroa, Hermmy Joel Namuche Atoche pasó diez días en Vigo para empaparse del ADN Celta. La escuela de Perú persigue los mismos fines que las de Rumanía o México, formar jugadores, pero sobretodo personas: "los valores son muy importantes porque muy pocos chicos llegan al fútbol profesional pero los valores le sirven para su vida, para afrontar mejor la relación a nivel laboral, con su familia, con sus amigos", confesaba el director de la Fundación del Celta, Germán Arteta.
En el caso de esta escuela en Perú, la situación es algo distinta, aquí lo primero es formar en valores a los chavales, alejarlos de la calle, la pelota es el medio pero no el fín. como aseguró Arteta en La Voz de Galicia "para nosotros son una prioridad. En el caso de Perú más todavía por las características que tiene", dijo.