Francia hace crecer las dudas por su rendimiento
Francia tenía el objetivo de clasificarse para los octavos de final de la Eurocopa como primera de grupo para evitar males mayores en las fases finales. Y, para lograrlo, tan solo tenía que conseguir ganar en la última jornada de la fase de grupos. Su rival era Polonia, que iba a pelear hasta el final. Todos los aficionados daban como favorita a Francia, aunque los polacos mostraron bastante entereza en defensa. Supieron repeler los ataques de los franceses, que llegaban por todos lados, durante toda la primera mitad.
Las dos amenazas más importantes de Francia eran Mbappé y Dembélé. Y, precisamente, ambos actuaron en el minuto 55 de partido. Dembélé se acercaba al área con velocidad y Polonia cometió penalti. Mbappé fue el encargado de transformarlo en el gol de Francia. De esta manera, todo parecía más encaminado a una cómoda victoria de los franceses.
Sin embargo, no era el día de Francia. En el minuto 79, cometieron un grave error y le regalaron un penalti a los polacos. Lewandowski fue el encargado de lanzarlo y Maignan detuvo en lanzamiento, pero el árbitro mandó repetirlo porque el portero se había adelantado. En el segundo intento, Lewandowski no falló y marcó el empate.
A partir de ese momento, Francia no tuvo mucho tiempo para reaccionar. Mbappé fue el jugador que más lo intentó, aunque no logró romper el empate. La victoria de Austria posteriormente colocó a Francia en el segundo lugar de la tabla, por debajo de las expectativas. Por esa razón, los octavos de final tendrán algo más de dificultad para el cuadro francés. Son una de las selecciones candidatas a hacer algo grande en esta Eurocopa, pero está claro que el rendimiento no está a la altura de las expectativas.