Una mini NBA contra niños

Con lo justo o menos que eso, el Unicaja da sus últimas bocanadas en este Top-16. Sin Granger, Toolson, Vasileiadis y Stefansson y con un puñado de imberbes y poco preparados chicos del filial para completar la rotación. De esta guisa recibe el equipo de Joan Plaza al CSKA de Moscú (Martín Carpena, 21:15).

De todos modos, en juego apenas hay una dosis de honra y el respeto que merece la afición de Málaga, la afición del Carpena. No faltarán los bemoles necesarios para afrontar el partido, pero es que el rival es tan, tan superior, que no extrañaría ver el partido acabado en el segundo acto.
Hay quien dice que el CSKA de Moscú, y quizás de manera acertada, podría partir su plantilla en dos y plantar cada una de esas mitades en la Final Four. No es descabellado. Porque para colmo se refuerzan con Kirilenko. ‘Demasiao’.
AK47 vendrá al Carpena y eso ya es motivo para acudir al pabellón. Es uno de los mejores europeos de la historia, un all star de la NBA, no lo olviden. Así que respeto máximo a su espigada figura, que se perdió la cita de 2011 el último año que anduvo por Moscú jugando (por culpa del lockout de la liga americana).
Plaza, para evitar que tras este partido (pase lo que pase) haya una crítica desmesurada hacia sus jugadores y su propio trabajo, ya plantó una rajada preventiva en la sala de prensa del Carpena. Le escoció recibir tanto palo tras perder en Milán.
Anuncia, por las bajas, que tendrá que tirar de jóvenes del Clínicas Rincón como Kenan Karahodzic, Morayo Soluade y Romaric Belemene. También habla de qué tipo de recursos buscará además de dar minutos a estos chicos. Los aleros jugarán de escoltas y Germán y Green harán funciones de tres. Con este panorama y ante el equipo que hay en todo el mundo más cerca de una franquicia de la NBA (Kirilenko, Teodosic, De Colo, etcétera), le toca al Unicaja ponerse el mono de Euroliga.