Fran Vázquez: "Si hay que levantar un título, me da igual donde sea"

Fran Vázquez fue el invitado de excepción en el programa Zona Verde, espacio dedicado al Unicaja y al baloncesto malagueño que cada semana emite 101 Televisión. El pívot gallego se lo pasó en grande, escoltado también por chicos de las Escuelas de Baloncesto de Los Guindos, que le pusieron en algún aprieto. Siempre cauto en el discurso, echó balones fuera a la hora de hablar de los objetivos deportivos. Insta al día a día, pero puestos a pensar en ganar, le da igual dónde y cómo, incluso se desmarca de elegir a Madrid o Barcelona en un hipotético duelo en la final: “Si hay que celebrar un título, me da igual levantarlo aquí o donde sea”.

Lo que está claro es que hay Fran Vázquez para rato. Su físico le ha llevado a ser uno de los mejores taponadores de la historia del baloncesto europeo. “He tenido suerte con las lesiones, mucha gente se queda sorprendida porque siempre estoy por los aires”, comenta Fran cuando se le pregunta cómo lo hace para no tener nunca lesiones musculares. Y como se ve tan bien, pues piensa seguir muchos años: “Si el cuerpo aguanta quiero jugar hasta los 36, 37…”. 
“Tener a Fran en Málaga es un lujo”. Es un mantra que se repite en la ciudad y sobre todo en el entorno del Unicaja. Ha sonado en boca de técnico, jugadores y medios. Y ahora resulta que Fran opina algo bien distinto: “El que tiene la suerte de estar en Málaga soy yo, el lujo es mío, no al revés”.
Así que parece que Fran seguirá mucho tiempo, seguramente cumplirá su objetivo de retirarse en Málaga. Aunque confesó que hubo una aventura que pudo afrontar cuando menos se esperaba: “El año del lock out hubo opciones reales de ir a la NBA, pero no quería arriesgarme a quedarme un año sin jugar”. Vázquez fue número once del draft elegido por Orlando Magic. No se arrepiente de haberse quedado en España. Recuerda anécdotas de aquellos días, frenéticos para él. De cómo su agente tuvo que comprarle un traje a medida para la ocasión, cómo conoció al excomisionado Stern, las interminables horas de entrevistas. Pero nos quedamos con una muy curiosa y que tiene que ver con la importancia que se le da en Estados Unidos a las ‘estampitas’: “Firmé 5.000 fotos para la NBA en un día y 5.000 al siguiente. Menos mal que me ayudaron mi mujer y mi agente. Y al día siguiente otras 5.000…”.
Y de su NBA a la de otros. No tiene claro que a Zoran Dragic le hubiese venido bien quedarse un año más antes de dar el salto. Pero sí espera que Jayson Granger no lo dé aún: “La última palabra la tiene él. Yo puedo decirle que se quede. Le tengo cariño y le aprecio. Siendo egoísta, le diría que se quede. Pero él siempre lo ha dicho que tiene ganas de jugar en la NBA”.
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