CSKA y Fenerbahce, ante el trámite de disputar el partido de los perdedores
El CSKA de Moscú y el Fenerbahce Ulker Estambul disputarán este domingo el partido que nadie quiere jugar en una fase final de la Euroliga, el que decide el tercer y cuarto puesto de la competición, al que se han visto abocados tras perder ayer contra Olympiacos y Real Madrid, respectivamente.Tras el varapalo sufrido en la jornada inaugural, ambos entrenadores tendrán que hacer un esfuerzo extra para recuperar desde el punto de vista mental a sus jugadores de cara al intrascendente partido de mañana.
El entrenador del equipo turco, el serbio Zeljko Obradovic, con ocho títulos a sus espaldas, ha reconocido que no cree que sea un choque "muy importante" para sus hombres, ya que tenían puesta "mucha ilusión" en disputar la final en su primera presencia en la fase decisiva del máximo trofeo continental.
"No creo que sea muy importante. Es muy difícil para mis jugadores porque tenían mucha ilusión en hacer algo importante aquí. Ese partido es muy duro y además tenemos un partido pendiente del playoff de Liga ante el Galatasaray", explicó en la rueda de prensa posterior al choque contra el Real Madrid.
También adelantó que repartirá minutos entre los menos habituales y por lo tanto "jugarán todos" ante el equipo ruso.
En la misma línea, el griego Dimitris Itoudis, entrenador del CSKA, admitió ayer que, "con todo el respeto para la Final Four, es un partido muy difícil de jugar", aunque adelantó que harán todo lo posible por intentar ganarlo.
La presencia de jugadores de la talla de Milos Teodosic, Nando de Colo o Andrei Kirilenko por parte rusa, y de Nemanja Bjelica -recién nombrado mejor jugador de la Euroliga- y Bogdan Bogdanovic, mejor joven de Europa en la presente temporada, por el Fenerbahce, es uno de los alicientes del choque de mañana.
El partido por el tercer y cuarto puesto precederá a la gran final que disputarán el anfitrión del torneo, el Real Madrid, y el Olympiacos griego, los mismos contendientes que jugaron la 'Final Four' de Londres 2013.
