N'Diaye: "Cuando me llamó Ndong no paraba de saltar de alegría"
Hamady N'Diaye ya jugó en Fuenlabrada sus primeros minutos con el Unicaja, pero lo precipitado de su llegada propició que su presentación se dilatara hasta este lunes. El jugador senegalés mostró una enorme satisfacción, sin parar de reír, después de su llegada a Málaga, donde ya estuvo hace dos veranos, preparando el Mundial de España con Senegal.
"Estoy extremedamente motivado. Quería venir a Europa. Tuve la llamada del Unicaja y empecé a saltar de alegría, no paraba. Tener aquí a leyendas como Boni Ndong y Carlos Jiménez causaron que estuviera realmente excitado. Empecé a dar saltos de alegría cuando me llamó Boni Ndong. Esperaba esta oportunidad desde hace unos años", aseguraba un entrañable N'Diaye, que transmitía ilusión desbordante: "Estoy contento de estar aquí. Jugar el partido en Fuenlabrada fue muy difícil. Tengo que conocer jugadores, aprender lo que el coach quiere. Es un proceso. Intenté lo que quería, especialmente en defensa, que es lo que yo mejor puedo hacer. Con buena disposición iré solucionándolo poco a poco".
"Necesito adaptación, pero todo lo que me encuentro es estimulante. Los compañeros, la ciudad, la afición, los entrenadores. No tengo queja, pronto me siento parte del equipo. Tengo que asimilar mucha información, pero quiero formar parte de este viaje", decía N'Diaye, que cuando estuvo en Málaga hace dos años tuvo un presentimiento: "Le dije a Boni Ndong, que es una leyenda en mi país y de quien puedo aprender mucho, ese verano que tenía el deseo de venir alguna vez en Málaga. Boni estaba de director técnico con Senegal. Entendí que era un lugar apropiado, en Europa, por cómo se trabajaba, la forma de entrenar. Era mi sitio... Y aquí estoy, en Málaga".
N'Diaye se definió como un jugador esencialmente defensivo pero capaz de producir también en ataque. "Me gusta hacer mates, soy un jugador atlético para ser pívot y pienso que puedo aprovechar esa cualidad", argumentó el senegalés, cuyo número favorito es el 5 y lo dobló al pasar a profesionales para darle más fuerza.
