El Madrid quiere volver a ganar en Moscú diez años después
Madrid, 31 ene (EFE).- El Real Madrid viaja a Moscú para disputar este jueves el partido de vuelta de la fase regular de la Euroliga ante el CSKA con el objetivo de volver a ganar en Moscú diez años después.,El 17 de diciembre de 2008 fue la última ocasión en la que el Real Madrid consiguió doblegar al CSKA en Moscú, por 78-82. Sólo Felipe Reyes queda de los protagonistas de los dos equipos, de aquel partido.,Ahora, casi diez años después, el Madrid tiene una nueva oportunidad aunque según LasoMadrid, 31 ene .- El Real Madrid viaja a Moscú para disputar este jueves el partido de vuelta de la fase regular de la Euroliga ante el CSKA con el objetivo de volver a ganar en Moscú diez años después.
El 17 de diciembre de 2008 fue la última ocasión en la que el Real Madrid consiguió doblegar al CSKA en Moscú, por 78-82. Sólo Felipe Reyes queda de los protagonistas de los dos equipos, de aquel partido.
Ahora, casi diez años después, el Madrid tiene una nueva oportunidad aunque según Laso "el guión del partido no se presenta fácil".
El CSKA es el líder de la máxima competición europea con un balance de 16-4 y aunque cayó por 82-69 en Madrid en la segunda jornada, desde entonces ha engranado a sus nuevos fichajes en la maquinaria de su juego y ahora es un equipo rocoso y fuerte, sobre todo en su cancha de juego.
Con Sergio 'Chacho' Rodríguez, Othello Hunter y Will Clyburn recién llegados al CSKA el equipo ruso acusó la falta de compenetración de sus fichajes, mientras que el Madrid, en las mismas circunstancias, se adaptó mejor a la situación y realizó un gran partido.
Ahora, más de tres meses después, el 'Chacho' y Clyburn son dos de las estrellas del CSKA junto a Nando De Colo, Cory Higgins, Leo Westermann, Nikita Kurbanov y se puede seguir hasta completar la plantilla de los rusos que tienen "mucho de todo" en todos los puestos.
La mayor diferencia la pone el Real Madrid que en el trayecto ha perdido a Gustavo Ayón y Ogjen Kuzmic por las lesiones. Trey Thompkins no jugó el partido de la primera vuelta y Anthony Randolph acaba de recuperarse.
También hay que poner como duda a Luka Doncic, que en el último entrenamiento de este miércoles, antes de viajar a la capital rusa, se torció un tobillo y su concurso es incierto a la espera de que puede recuperarse en poco más de veinticuatro horas.
La presencia de Walter 'Edy' Tavares es, quizá, el elemento más sobresaliente en el partido porque abre un nuevo abanico de posibilidades en el juego del Real Madrid, que nunca tuvo un pívot tan alto en los choques entre ambos equipos en el último decenio.
De alguna forma, el Madrid puede intentar hacer lo que hacía el equipo ruso en la década de ochenta cuando Vladimir Tkachenko (2,21 metros) era el gran zar de los aros y tableros de Europa. Con Tavares, también de 2,21 metros, el Madrid debe intentar no solo dominar los aros sino intimidar a los muchos y fiables tiradores del CSKA.
Los pívots del CSKA no son especialmente altos, pero su envergadura, salto, atleticismo, velocidad y capacidad defensiva los hacen igual de temibles. "No los considero pequeños, si acaso bajitos comparados con Tavares, pero nada más", sentenció Laso.