El Unicaja ya mira al Movistar Estudiantes tras la revitalizadora victoria frente al San Pablo Burgos. Los de Josep María Berrocal pasan por un momento duro y se complica su permanencia en la Liga Endesa. Sólo tienen una victoria de margen con la zona baja. En esas reciben a los de Luis Casimiro este miércoles (12:30 horas). Se agrava la situación para los madrileños, que no podrán disponer de Darío Brizuela, su hombre referencia. El escolta se produjo un esguince del ligamento lateral externo de su rodilla derecha en el partido ante el Herbalife Gran Canaria.
El parte médico oficial habla de que el jugador está "pendiente de evolución", aunque en otros casos con idéntica lesión la baja se ha prolongado como mínimo un mes. El Dr. Pérez Toledano, que le hizo las pruebas, afirmó que estará "en observación estos días, de cara a los próximos partidos". El vasco es una de las gratas sensaciones de la temporada y un valor al alza. De hecho, entró en los planes de Sergio Scariolo para las ventanas FIBA, donde debutó y fue siendo más protagonista con el paso de los partidos. El exterior promedia 14.7 puntos, 1.7 rebotes y 3 asistencias para 13.3 de valoración. Una ausencia muy sensible para los del Ramiro de Maeztu, para los que impera un triunfo. En el encuentro no estará tampoco Carlos Suárez.
Se allana sensiblemente el camino para el Unicaja, que tiene un particular examen en el Wizink Center. El cuadro malagueño aún no ganó a domicilio en lo que va de 2019 y es un tema que se enquistó. "El mayor objetivo es ser ambiciosos y ser sólidos para competir en cualquier sitio, a ver si somos capaces de conseguirlo", comentaba Casimiro, consciente de que se trata de una tendencia que se debe invertir para asegurar la quinta plaza en la ACB para las eliminatorias por el título.