Los amantes de los SUV tienen a su disposición muchos vehículos en el mercado. No es ningún secreto que es un sector que va al alza, y la mayoría de las marcas ya han lanzado, como mínimo, un modelo así a los concesionarios.
Y dos de los que más repercusión están teniendo son el Seat Tarraco y el Toyota Rav4, dos SUV de gama media que luchan por hacerse con el liderato en venta. La pregunta está clara: ¿Cuál de los dos es mejor?.
La comparativa
No es una repuesta sencilla. En cuanto al motor, Seat ha apostado por las motorizaciones clásicas, es decir, gasolina y diésel. En gasolina, existe la opción de un 1.5 TSI de 150 caballos, y un 2.0 TSI de 190 caballos. En diésel, un único 2.0 TDI con dos variantes, una de 150 cv y otra de 190cv.
Por el contrario, en Toyota han apostado también por una versión híbrida. Al fin y al cabo, el mercado apunta hacia esa dirección. Llega con un 2.5 litros que otorga 177 caballos que, con la ayuda de los dos motores eléctricos, hacen que la potencia total suba hasta los 222 caballos.
Eso sí, la transmisión del Toyota deja mucho que desear en este aspecto. De ahí que, al menos en el apartado del motor, el Seat resulte ganador.
El interior
Ya en el interior, la comparativa se hace aún más difícil. En Toyota lo han mejorado incorporando dos pantallas, una de siete pulgadas y una de cuatro. Por su parte, al Tarraco cuenta con una de ocho pulgadas, pero la instrumentación no es digital, por lo que se queda un paso atrás.
Por lo que respecta al maletero, el Toyota se queda muy corto con sus 580 litros. El Tarraco, por el contrario, tiene una capacidad de 700 litros ampliables hasta los 760.
¿El ganador? Si lo que buscas en un SUV híbrido de primer nivel, el Rav-4 es tu coche. Si no, si prefieres un motor convencional, los acabados y las prestaciones del Seat se llevan el gato al agua.