Joan Barreda se va del Dakar "más amargo" que con el abandono del año pasado

El motociclista español Joan Barreda (Honda) afirmó hoy tras abandonar el rally Dakar en la tercera etapa que su retirada es este año más amarga que el anterior, cuando se quedó fuera de carrera en las últimas etapas.

Barreda se metió en un barranco del que no pudo salir y tuvo que ser rescatado por un helicóptero, mientras que el año pasado tiró la toalla cuando se alejó de la cabeza de la clasificación tras correr la mayor parte del rally muy mermado por dos lesiones en la muñeca y el brazo.

"Es más amargo este año. El año pasado veía que después de medio año no me recuperaba, y de alguna manera me lo imaginaba, pero este año tenía la sensación de haber hecho el trabajo, y se ha escapado", lamentó Barreda tras llegar al campamento donde terminaba la etapa.

"Es duro, la verdad es que en el primer momento no me podía creer que estuviera ahí y no pudiera salir. Es una impotencia muy fuerte", agregó.

El piloto castellonense comentó que cayó en el barranco cuando seguía la flecha que se había activado en uno de los sistemas electrónicos que le marcaba la cercanía de uno de los puntos GPS ocultos en la ruta que los pilotos deben activar para continuar su camino, ya que de lo contrario son sancionados.

Barreda detalló que ese punto estaba en una zona de altiplano donde había mucha niebla que no le permitía ver ni a dos metros por delante.

"Iba despacio porque no veíamos nada. No he podido reaccionar porque no tenía visibilidad", apuntó Barreda, que participaba en su noveno Dakar.

"Era una zona donde yo iba con pies de plomo y de repente me fui hacia abajo por un cañón de arena. Me desplacé unos 15 o 20 metros hasta que pude frenar la moto. Luego intenté sacarla pero patinaba mucho", añadió.

Barreda intentó salir infructuosamente e incluso luego avanzó por el cañón con la esperanza de encontrar una salida por el lado contrario, pero terminó agravando más su situación y tuvo que llamar a un helicóptero, aunque este tampoco podía ingresar a ese estrecho cañón.

El piloto de Torreblanca (Castellón) valoró que al menos estaba bien físicamente "porque podía haber muerto desangrado" si hubiese quedado herido en ese sitio a causa de un accidente por la dificultad para acceder al mismo.

"Es extraño salir en una etapa así con tanta niebla donde no pueden llegar los helicópteros. Estamos hartísimos de que se retrase la salida o se cancele en otras etapas, pero hoy era un día en que si retrasaban la salida, la gente no acababa", advirtió.

Preguntado por la suerte aciaga que tiene en el Dakar, donde lo ha abandonado en cuatro ocasiones de las nueve que ha corrido y su mejor resultado es un quinto puesto, Barreda aclaró que está agradecido con este rally.

"En días así como hoy, a veces piensas profundamente, y a pesar de no haberla ganado y poner todo y que no salga, estoy súper agradecido a lo que me ha dado la carrera. Soy una persona totalmente diferente a la que era hace ocho años", afirmó.

Barreda explicó que ahora se centrará en planificar su temporada de 2019 al encontrarse bien físicamente, no como el año pasado, cuando después del Dakar tuvo que pasar dos veces por el quirófano por dos graves lesiones.