Si tienes un Tesla, u otro coche eléctrico, un informe cuenta lo cuestan las reparaciones en comparación a gasolina o diésel
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La cuota de coches eléctricos e híbridos enchufables aumenta. Cada vez son más conductores los que deciden dar el paso hacia la electrificación. Esto se debe a una combinación del aumento de las restricciones de movilidad y del hecho de que cuando compramos un coche lo hacemos para que tenga una vida útil de al menos 10 años. Porque claro, si pretendemos poder circular con normalidad con el coche que nos compramos hoy en 2030, será necesario acceder a coches con tecnologías EV o PHEV.
Dos tecnologías relativamente nuevas de las que poco a poco vamos conociendo más detalles que no conocíamos. Por ejemplo, cuanto cuestan las reparaciones. Y si tienes un Tesla, un ID. de Volkswagen, un BMW de la gama i u otro coche eléctrico, te interesa saberlo.
Las reparaciones de los EV y PHEV vienen a costar lo mismo que las de gasolina y diésel
En este sentido, los coches eléctricos cuentan con menos piezas que los convencionales, lo que a priori debería implicar menos inversiones cuando lo reparamos. Sin embargo, nada más lejos de la realidad.
Según un estudio de AZT Automotive, las reparaciones de los coches eléctricos o híbridos enchufables cuestan prácticamente lo mismo que los térmicos. Concretamente, la reparación de un eléctrico 100% equivale más o menos a lo que cuesta reparar un gasolina, mientras que el coste de las reparaciones en los híbridos enchufables viene a costar lo mismo que reparar un diésel.
Pero eso no es todo. También debemos tener en cuenta que los coches eléctricos e híbridos enchufables también precisan sustituir neumáticos, pastillas de freno, o pilotos luminosos, entre otros detalles, con lo que cualquier revisión con sustitución de algunos elementos también viene a costar lo mismo.
Los gastos se disparan si entran cables o baterías
Y ojo, porque los eléctricos y los PHEV no solo no mejoran los costes de reparación respecto a los térmicos. Porque cuentan con algunos elementos que pueden suponernos un ojo de la cara.
Nos referimos a las baterías y a los cables de alta tensión, que suelen costar precios bastante altos. En ocasiones la mitad de lo que vale el coche. Así que ojo si tienes un siniestro, porque la batería y los cables vienen cubiertos de revestimientos resistentes, pero debemos cambiarlos en caso de tener un siniestro. Y en el mejor del los casos, solo habremos dañado la parte externa. Para nuestro bolsillo, más vale que sea así.
