Es más pequeño que el Toyota RAV4, pero 10.000 euros más barato e igual de bueno en todo
Modelos como el Toyota RAV4 saben que, al menos en la mayoría de los casos, su mejor momento ya ha pasado en España. Si bien es cierto que algunos SUV de tamaño medio como son el Hyundai Tucson o el Kia Sportage siguen siendo modelos muy exitosos en España, también lo es que son los SUV que se sitúan un escalón por debajo los que más está creciendo en cuanto a ventas en nuestro mercado.
Y seguramente el mejor ejemplo de ello lo podemos encontrar en Toyota, una marca que tiene no uno sino dos SUV compactos a la venta en nuestro país: el C-HR y el Yaris Cross.
El primero es el más veterano de todos y un modelo que, por diseño, se diferencia mucho del RAV4. En el caso del segundo, muchos sí que ven en él una versión ‘mini’ del SUV de tamaño medio japonés. Los dos están triunfando en nuestro país, aunque es el C-HR el que, al menos de momento, está ganando la partida en cuanto a ventas.
El Toyota C-HR sigue siendo un modelo muy exitoso en España
Con casi 11.000 matriculaciones en lo que llevamos de año, este C-HR puede presumir de ser ni más ni menos que el sexto modelo más vendido en nuestro mercado. Un éxito en el que la excelente relación calidad/precio se ha convertido en su mejor arma.
Es cierto que hay SUV más baratos que este Toyota, pero el hecho de que cuente con un motor híbrido puro hace de él una opción cada vez más demandada. Entre otras cosas porque, además, no deja de ser una opción igual de buena en cuanto a calidad que el RAV4 pero mucho más barata.
Como bien podemos ver en quecochemecompro.es, mientras que el RAV4 más barato de todos tiene un precio de 38.050 euros, un precio con los descuentos por financiación ya incluidos, el C-HR en su versión de acceso tiene un precio de 27.950 euros, es decir, más de 10.000 euros más barato. Una diferencia de precio que provoca que muchos, pese a perder habitabilidad y capacidad de carga, vayan a por el C-HR.
Además,de esos 2 comentarios (de Luis y LluMac) agrego: las concesionarias en USA le cambian los rines, piezas muy sensibles que se dañan,piezas que se quiebran y no hay quien se responsabilice, a tal grado que ni la concesionaria, ni la Toyota reparan en cubrir los daños de fábrica. Toyota, su prestigio ya no es el de antaño, tienen una política nefasta para engañar al cliente. Por eso, ni regalado vuelvo a comprar un C-HR. Mi auto de 2020.
El problema es el poco rendimiendo en carretera con el motor de 121 hay que ir al 1.8 y lo otro que me ha parado en su compra es la poca visibilidad trasera y el espacio y sensacion de apretura o agobio en plazas traseras.
Aparte del diseño que puede hacer decantar una decisión de compra, la cilindrada es la que primará en la compra, un coche más grande con poca cilindrada no es una buena opción.