5 motivos por los que el coche no arranca a la primera en frío: avisan de problemas
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Si tienes coche, seguramente habrás experimentado en alguna ocasión que a tu automóvil le cuesta arrancar. Algo que ocurre sobre todo en invierno. Un problema que puede deberse a varios factores. A continuación repasamos las cinco causas más comunes por los que puede suceder.
Cinco problemas habituales cuando el motor no arranca a la primera
Una de las principales causas está en la batería. Aunque lo habitual es que la batería dé señales de que se está agotando, estas se ven potencialmente afectadas por el frío. Debes tener en cuenta que la tensión de la batería debe ser superior a 12,2 voltios. Si no lo es tendrás problemas para arrancar el coche, por lo tanto te conviene cambiarla. Los precios suelen arrancar entre los 20 y los 30 euros.
Otro de los motivos por los que el coche tarda en arrancar puede estar en el motor de arranque. Si ves que al girar la llave solo se escucha un chasquido, pero las luces y demás elementos funcionan correctamente, tendrás que cambiar el motor de arranque.
Estos suelen durar unos 150.000 km, pero es cierto que con el sistema Start & Stop sufren especialmente, con lo que esos 150.000 km no siempre se cumplen. Un motor de arranque nuevo cuesta unos 200 euros.
El problema también puede estar en el alternador, que es el elemento encargado de transformar la energía mecánica en eléctrica para recargar la batería. Si esta energía no se almacena es que el alternador puede estar dañado. Aunque también puede que lo único que falle es la correa del alternador.
Los alternadores suelen durar unos 300.000 km. Y su precio ronda los 500 euros.
Otro de los elementos que puede estar fallando son las bujías en los gasolina o los calentadores en los diésel. Las primeras son las encargadas de generar la chispa para iniciar la combustión. Los calentadores son los encargados de calentar el combustible en los diésel para iniciar la autoignición. Un calentador suele costar unos 30 euros, mientras que las bujías son mucho más baratas.
El quinto elemento a tener en cuenta es la correa de distribución. En este caso el problema es más grave, pues puede suponer un cambio de motor completo al poder haber sufrido este daños en el movimiento. Es recomendable hacer revisiones de la correa a menudo y no esperar a que se rompa.