Una mejoría insuficiente (1-1)

Los dos equipos comenzaron con muchas precauciones y demasiado miedo. Dudas que golpearon primero al Xerez. El Racing, en su primera y prácticamente última aparición en ataque, se adelantó en el marcador tras un remate de Kaluderovic. La defensa nuevamente se había evaporado y Chema hizo la estauta. Ni la olió. Los fantasmas de esta temporada pronto se presentaban en Chapín.
Pero en esta ocasión sí hubo reacción. Y no tardó en llegar. A los nueve minutos de juego, Maldonado remataba un buen centro de José Vega desde la banda. Con el empate comenzaba otra vez el partido. Y el Xerez hizo más méritos en el resto de primera para darle la vuelta al partido. Pero no se encontró más con el gol. Iago, en el 17, remató pero se encontró con el meta rival.
Con un Racing sin ideas, el Xerez manejaba mejor el esférico. Ofrecía mejores sensaciones que en partidos pasados. Al menos se estaba ofreciendo otra cara. El problema llegaba cuando el Racing pasaba del medio campo. El equipo empezaba a temblar. Jairo y Francis fueron los únicos que buscaron fortuna por parte del conjunto visitante con lanzamientos lejanos. Poco a poco, el cuadro azulino fue ganando en seguridad y seguía con una mayor presencia en el campo que su presencia.
Sidi Keita, el nombre propio del partido por su vuelta a los terrenos de juego, se encargaba de cortar las intenciones de juego del Racing. Con Bruno Herrero algo más liberado que de costumbre, Álvaro Rey y José Vega le dieron movilidad a las bandas en la primera mitad. Al Xerez únicamente le faltó rematar su mejoría de juego con respecto a otras jornadas.
En la segunda, los azulinos bajaron un poco la intensidad, pero siguieron teniendo más presencia en el campo que un Racing indolente. José Vega, en el minuto 53, probó fortuna con un disparo cruzado que salió fuera por poco. Al Xerez le faltaron ocasiones de peligro, le faltó un poco más de empuje, de pegada, de definición en los metros finales. Se mejoraron cosas, se dieron pasitos adelante, pero todavía quedan muchas cuentas pendientes.
El Racing mostró muchos síntomas preocupantes. No aportó nada al partido, ni en la primera ni en la segunda. Arás muy endeble y arriba sin ideas ni recursos. El Xerez desaprovechó una buena ocasión para lograr una victoria que le hubiera sentado fenomenal a los de Esteban en el capítulo anímico. La dedicatoria a Rafa García, al que Maldonado le brindó el gol, no pudo ser completa.