El lastre del físico, problemas en la zaga y un rival inadecuado para reaccionar

No le pueden ir peor las cosas al Xerez Club Deportivo en la liga. Ha disputado cuatro encuentros ya pertenecientes a la competición del grupo X de Tercera, y todos los ha perdido, algo que le deja en una posición clasificatoria nefasta, sin puntuar junto a La Palma y Pozoblanco.

En el club todos pedían tiempo, pero ya ha transcurrido un periodo razonable y es normal que se empiece a reclamar un mejor rendimiento deportivo. Es cierto que el equipo ha competido bien en la Copa, plantándose en la tercera eliminatoria después de eliminar en los penaltis a dos equipos de superior categoría. Pero precisamente esta circunstancia ha hecho aflorar los problemas físicos del conjunto azulino, que acumula demasiado esfuerzo y minutos en sus piernas.
Los de Puma han venido realizando una especie de pretemporada, dado que comenzaron a trabajar muy tarde, con la competición asomando. De hecho, al plantel han ido incorporándose jugadores con la liga empezada y es lógico que el grupo no esté conjuntado. Pero el equipo no debe escudarse en esto para permitir que avancen las semanas sin que aparezca la reacción necesaria. Lo decía a esta web tras el duelo en Huelva el propio Ricardo García. Y es que ya estamos a mediados de septiembre, que es la fecha que Puma ponía en un principio para ver el nivel del equipo.
El gran lastre es el estado físico, algo en lo que todos coinciden. En la ciudad deportiva del Recre, el Xerez acabó pese a todo en campo contrario y buscando el gol, pero la diferencia se notó con el paso de los minutos. Lo admitía Juan Llaves tras el partido. Hablaba el delantero algecireño del poderío que, en este sentido, tienen los filiales, que cuentan con jugadores jóvenes con hambre que van a todas. Y eso es lo que, por el momento, les toca a los azulinos.
El fin de semana venidero recibe en Jerez al Betis B, que además de ser un filial, exequipo de Puma por cierto, se encuentra en un un gran estado de forma y segundo clasificado tras ganar tres partidos y empatar uno en cuatro jornadas. Los verdiblancos llegan al choque tras vencer 4-1 al Ayamonte. Luego, el Xerez se las verá con el Sevilla C, que no ha comenzado bien y sólo suma un punto.
El Xerez debe resolver su falta de contundencia y seguridad atrás. La dirección deportiva está aún intentando reforzar la retaguardia, a la que acaba de llegar Ismael Barragán, al entender que esta parcela necesita una mejoría. De hecho, es el equipo más goleado del grupo, con diez goles encajados en cuatro partidos. Y suerte que Javi Muñoz está teniendo buenas actuaciones.
Puma tiene la materia prima en sus manos y, a decir verdad, el equipo ha actuado bien en determinadas fases de los encuentros, mereciendo mejor suerte en ocasiones. Pero, sin duda, queda mucho trabajo por delante y en estas cuestiones tratadas está buena parte del problema. Del centro del campo hacia adelante hay talento, y es cuestión de tiempo que aparezca. Pero el grupo, en conjunto, debe mostrarse sólido al defender y ser capaz de aguantar al cien por cien y sin desconcentraciones los noventa minutos cada jornada. En Huelva, es justo reconocerlo, fue golpeado cuando más meritos para adelantarse estaba haciendo.