Brasil acaba con Italia y se cita en la final con Tahití, subcampeón de 2015
Tres goles de Mauricinho pesaron en la paliza por 8-4 que la selección de fútbol playa de Brasil infligió este sábado en Nassau a la de Italia para avanzar a la final de la novena edición de la Copa Mundial, a la que llega Tahití por segunda vez consecutiva.Los brasileños jugarán la sexta final en la historia de la competición y los tahitianos, subcampeones en la versión de Portugal 2015, espera este domingo la consagración en el National Beach Soccer Arena.
Italia llegó a inquietar pero los cinco goles anotados por Brasil en el segundo periodo desactivaron toda su resistencia.
Ni el máximo goleador del Mundial Gabriele Gori, que llegó a quince, intimidó a los brasileños, que se dieron un festival con los goles del portero Mao, Catarino, Lukao, Boquinha y Rodrigo.
Italia dio señales de vida al marcar también con Mateo Marrucci, Francesco Corosinitti y Darío Ramacciotti, pero la presión de los sudamericanos resultó asfixiante en todos los sectores de la arena.
Las selecciones de Tahití y Brasil ya se encontraron en la lucha por el tercer puesto del Mundial que los oceánicos organizaron en 2013. Tras un espectacular empate a siete goles, la Canarinha aseguró la plaza al ganar por 1-0 en la instancia de penaltis.
Tahití avanzó este sábado a su segunda final consecutiva de la Copa Mundial de fútbol playa al doblegar horas antes a Irán por 2-3 en una tanda de penaltis tras un partido nervioso que en su tiempo reglamentario quedó 1-1.
Las emociones del encuentro celebrado en el National Beach Soccer Arena de Nassau quedaron reservadas a partir del segundo tiempo.
Ali Nazem aprovechó un error defensivo de Tahití para poner en ventaja a Irán, que muy pronto decidió retroceder sus líneas para aguantar la presión y proteger la magra renta.
El planteamiento rácano salió caro pues el capitán tahitiano Patrick Tepa encontró un resquicio para habilitar a Naea Bennett, quien con clase dejó todo igual, hasta el fin del tiempo extra.
En la tanda de penaltis, el guardameta iraní Peynam Hosseini neutralizó tres de los doce lanzamientos registrados, pero sus compañeros desperdiciaron lo que tuvieron en sus pies.
La primera semifinal planteó una dura prueba para Tahití, quien no pudo contar por sanción con su estrella, Haimanu Taiarui, Balón de Oro en Portugal 2015.
La buena noticia es que Taiarui estará este domingo en la final frente a Brasil.
Para acceder a las semifinales jugadas hoy, Brasil se deshizo con un estrecho 4-3 del último campeón, Portugal, y Tahití superó a Paraguay por 4-6.