El Elche pone fin a tres años de frustraciones con el ascenso a Segunda
Elche (Alicante), 23 .- El Elche CF ha puesto fin este sábado en la ciudad deportiva del Villarreal a tres años de frustraciones deportivas e institucionales que llevaron a la entidad de estar consolida en Primera División a militar en Segunda B.
El conjunto ilicitano, tras firmar de la mano de su técnico, José Rojo 'Pacheta', un final de temporada espectacular, ha logrado regresar al fútbol profesional un año después del traumático descenso vivido en Cádiz que puso en serio peligro la estabilidad de la entidad.
Al descenso deportivo, inesperado porque el equipo estaba diseñado para pelear por el ascenso, el Elche unió el mazazo que supuso para su afición el descenso administrativo de 2015, apenas unas semanas después de que firmara una de las mejores temporadas de su historia en Primera, quedando en la decimotercera posición.
Acuciado por la necesidad de regresar lo antes posible al fútbol profesional, el Elche, tras superar un convenio de acreedores, apostó el todo por el todo al ascenso, confeccionando una plantilla completamente nueva en la que solo se mantuvieron del pasado Nino y Edu Albacar, dos símbolos de la entidad, y jóvenes talentos emergentes de la cantera, como el guineano Sory Kaba.
El Elche entregó la dirección del equipo a Vicente Mir, exjugador y exentrenador del filial, y el equipo comenzó la temporada arrasando. Llegó a situarse líder de la competición, igualando con el Mallorca, quien finalmente sería campeón.
Las urgencias y las exigencias que se impuso el consejo y la dirección deportiva, cuyo objetivo era el campeonato de grupo, provocaron la destitución de Mir con el equipo en segunda posición y con solo 14 partidos consumidos de la temporada.
Tras el valenciano llegó al banquillo Josico Moreno, quien no aportó la estabilidad al equipo, que llegó a estar fuera de la zona de promoción una jornada. Su mala sintonía con la plantilla y la mala imagen del equipo a domicilio provocó su destitución tras 12 partidos.
El Elche, que llegó a ver peligrar la promoción, se entregó a Pacheta como remedio de emergencia y el burgalés fue el revulsivo esperado. Contagió al equipo y al entorno de su energía positiva y el Elche, que rozó la segunda plaza hasta la última jornada, entró en la fase de ascenso pletórico tras sumar 11 partidos sin perder.
Poco a poco, la afición ilicitana, desencantada con los últimos años, fue creyendo en el proyecto y en apenas unos meses se pasó de 5.000 espectadores en el Martínez Valero, en el debut de Pacheta, a los más de 20.000 del duelo final ante el Villarreal B.
La veteranía en la portería de José Juan, la solidez defensiva, destacando la aportación de Gonzalo Verdú y del colombiano Neyder Lozano, fichaje revelación del mercado de enero, y el poder ofensivo del trío formado por Benja, Nino y Sory, con más de 40 goles entre los tres, fueron determinantes para el resurgir de un equipo diseñado para ascender.
En las eliminatorias por el ascenso, la dinámica positiva se mantuvo ante el Real Murcia, Sporting B y Villarreal B.