Cruce de campeones
Madrid, 30 nov (EFE).- La coincidencia en el mismo grupo de las dos últimas campeonas del Mundo, Alemania y Francia y del vigente ganador continental, Portugal, avivan desde su inicio la Eurocopa 2020, por primera vez itinerante, repartida en distintas sedes y con Londres como destino último para las semifinales y la final, prevista en Wembley el próximo 12 de julio.,Es el cruce inicial de los finalistas de Francia 2016, que coronó a Portugal como campeona del último gran torneo europeo después
Madrid, 30 nov .- La coincidencia en el mismo grupo de las dos últimas campeonas del Mundo, Alemania y Francia y del vigente ganador continental, Portugal, avivan desde su inicio la Eurocopa 2020, por primera vez itinerante, repartida en distintas sedes y con Londres como destino último para las semifinales y la final, prevista en Wembley el próximo 12 de julio.
Es el cruce inicial de los finalistas de Francia 2016, que coronó a Portugal como campeona del último gran torneo europeo después de superar a los 'bleu' en París. Comparten ambos ahora la puesta en marcha de la fase final de la decimosexta edición, pendiente aún de su configuración definitiva con las eliminatorias de repesca, de donde saldrán los cuatro últimos equipos nacionales para establecer el cartel definitivo del torneo.
Tres de las favoritas coexisten desde el inicio en un mismo espacio. Alemania, Francia y Portugal, a los que se sumará el equipo rescatado de las eliminatorias entre Islandia, Rumanía, Bulgaria y Hungría conforman el Grupo F.
Los dos primeros de cada uno de los seis grupos tendrán asegurado el pasaporte hacia octavos. Los cuatro mejores terceros también avanzará en la competición.
Las recientes campeonas del mundo en Brasil 2014 y Rusia 2018 y la ganadora del Europeo 2016 están citadas entre Múnich y Budapest, sedes establecidas para este cuarteto, tras el sorteo. Cristiano Ronaldo frente a Kylian Mbappe; Joao Félix ante Antoine Griezmann; Toni Kroos, Joshua Kimmich, retos individuales, y estrellas mundiales que aglutina el torneo desde el evento.
Dos equipos consolidados, maduros y experimentados como Francia y Portugal ante la flamante camada germana, que aspira a remontar el vuelo en una alta competición internacional después del sinsabor que padeció en Rusia 2018. El aire fresco alienta al combinado de Joachim Low, que acabó la fase de clasificación como primera de un grupo complicado.
Un caso similar al de Italia, distante en las últimas ediciones del protagonismo que dicta su historia. El cuadro transalpino vuelve a la cita después de un recorrido impecable por la ronda previa. Se topa con Suiza, Turquía y Gales. El conjunto de Roberto Mancini encabeza el Grupo A, en Roma y Baku.
El conjunto helvético, que entrena Vladimir Petkovic, fue una de las animadoras del Mundial ruso. Turquía, por su parte, vuelve a la elite. Reconocido por su resistencia carece de referentes. El grupo es su fuerza. Gales, aceleró al final. Un escaparate para Gareth Bale, líder del grupo de Ryan Giggs que en Francia 2016 fue una de las revelaciones.
España vuelve a encontrarse con Suecia con la que ya se midió en la fase de clasificación. Con Luis Enrique de nuevo en el banquillo la Roja transitará por Bilbao, donde jugará sus tres partidos, en un cuarteto que tiene a Dublín como el otro escenario.
Robert Lewandowski, uno de los mejores nueves del mundo, es la amenaza para el conjunto español y también para Suecia, que exprime su rendimiento en las fases finales y que ha sabido evolucionar desde la retirada de Zlatan Ibrahhimovic.
Se sostiene en la solidez el conjunto escandinavo, con futbolistas punteros ya en los grandes equipos del Viejo Continente. Lewandowski es una garantía para Polonia, capaz de poner en cuestión a cualquier equipo. El cuarteto se completará con el repescado de los duelos entre Bosnia Herzegovina, Eslovaquia, Irlanda del Norte y la República de Irlanda.
Otra de las selecciones que ha tenido un recorrido impecable para llegar a la fase final es Bélgica. El conjunto de Roberto Martínez pretende rentabilizar la mejor generación de futbolistas de su historia. Está al borde del fin de ciclo. Los diablos rojos, terceros en el Mundial, coinciden con Rusia, que sobresalió en su mundial más de lo esperado, Finlandia y también Dinamarca, dos equipos con alma de animadores en escaparates de esta magnitud.
A Inglaterra siempre la acompaña el cartel de favorito. El alto nivel evidenciado a nivel de clubes y el talento que acompaña a los futbolistas de su actual generación advierten al bloque de Garteth Southgate como uno de los equipos a batir. El seleccionador inglés ha logrado un plantel sólido y convencido. Tal y como demostró en el último Mundial, donde llegó hasta semifinales.
El conjunto inglés se topa con Croacia, en una de las últimas apariciones de la gran generación que llegó hasta el subcampeonato del mundo en Rusia. Liderada por Luka Modric, que enfila el tramo final de su carrera, e Ivan Rakitic, planta batalla a cualquiera a pesar de su corto plantel.
También forma parte del Grupo D que jugará entre Londres y Glasgow, la República Checa, habitual en las últimas grandes citas, y el ganador de la repesca entre Escocia, Noruega, Israel y Serbia.
La fase de grupos se completa con el que conforman Holanda, Ucrania y Austria y que completará el mejor de Georgia, Macedonia Kosovo y Bielorrusia y que tendrá en Amsterdam y Bucarest sus escenarios.
Los Países Bajos han superado el bache de tiempo atrás y de la mano de Ronald Koeman vuelven a contar como aspirantes. Favoritos dentro del Grupo C para avanzar a los octavos de final, se sostiene entre la explosión del Ajax y la madurez de jugadores que forman parte del concierto internacional extranjero.