Samu Castillejo: "En Milán si sales a la calle sin autorización puedes ir a la cárcel"
El malagueño Samu Castillejo, ahora jugador del Milan y que vivía un gran momento deportivo hasta que estalló la crisis del coronavirus, se encuentra recluido en su domicilio desde hace varios días. No obstante, Milán es uno de los grandes focos del virus que está acechando el planeta, y la situación en dicha ciudad es de control absoluto. Desde Italia, el exjugador del Málaga atendió a 'El Partidazo de COPE' y explicó su situación: "Sólo se puede salir con una autorización, sobre todo para la gente que trabaja. El resto sólo puede salir en caso de emergencia, comprar al supermercado o a las farmacias. Si sales sin esa autorización te pueden caer hasta tres meses de cárcel".
La semana pasada, cuando estalló todo, fue al supermercado y "parecía más un hospital, todo el mundo iba con mascarillas y guantes". En la distancia, ve en España similitudes con lo que se vivió en Italia: "Estáis en la situación en la que estábamos nosotros hace tres semanas, en la que la gente no tenía claro qué iba a pasar. Te asustas, lo compras todo y te quedas en casa. Esa situación ya la pasamos, ahora los supermercados están normales. Hay mucho respeto a lo que se dice, las calles están vacías".
Una de las obligaciones es acudir a los supermercados sin compañía, "solo", y mientras tanto Samu pasa las horas como puede. "Vivo solo en mi apartamento, es lo más aburrido del mundo. He cocinado, limpiado, hablo con la familia, los amigos... no me queda otra", explicó el malagueño: "No te tenido síntomas, pero ahora te duele un poco la cabeza y dices: 'A lo mejor lo tengo'. Yo me toco la frente todo el día".
Cree que estará aún más tiempo recluido
Por último, explicó que el club les ha mandado a cada jugador "un programa" de trabajo, pero sólo pueden hacer "abdominales y planchas", a la espera de que el próximo lunes, en principio, vuelvan al centro de trabajo: "Pensamos que nos tendremos que quedar más tiempo en casa, hay jugadores infectados". "No quise hacer venir a mi familia y pasarlo yo solo. Soy un desastre pero con videollamadas a mi madre estoy cocinando", terminó contando un Castillejo al que la gran crisis del coronavirus le tiene encerrado en su domicilio.
