Liverpool y Manchester United aprietan por una Superliga europea con JP Morgan y la FIFA detrás
El Liverpool y el Manchester United están implicados en la creación de una Superliga europea de 18 equipos que sustituiría a la Champions League, según informó Sky News.
Esa cadena de televisión avanzó que más de una docena de clubes de Inglaterra, Francia, Alemania, Italia y España estarían en conversaciones para convertirse en miembros fundadores de la competición, que se jugaría con formato de liga, con 18 equipos y dos vueltas.
Top English clubs in bombshell talks to join European Premier League https://t.co/1k5qvSKFff
— SkyNews (@SkyNews) October 20, 2020
Sustituiría a la actual Liga de Campeones y acabaría con un 'playoff' entre los equipos mejor clasificados.
Real Madrid, FC Barcelona, Atlético de Madrid, Juventus de Turín, Bayern de Múnich y Paris Saint Germain son otros de los equipos que aparecen en la nómina de este torneo, según la misma fuente.
Arsenal, Tottenham Hotspur, Manchester City y Chelsea también estarían interesados en unirse a la competición que, como pronto, empezaría en 2022.
El problema para ellos es que solo se permitiría la inclusión de cinco equipos por liga como máximo, lo que dejaría fuera a uno de los componentes del 'top seis' del fútbol inglés.
La financiación detrás de la Superliga europea
Sky News señala que el banco JP Morgan aportaría más de 5.000 millones de euros para apoyar la creación de este torneo que, añade, tendría la aprobación de la FIFA, aunque no de la UEFA.
El anuncio oficial de esta Superliga europea podría producirse a finales de este mes, aunque aún quedan muchos flecos por cerrar, destaca la misma fuente.
Este movimiento acercaría el fútbol europeo al modelo estadounidense, en el que la temporada regular termina para dar paso a unos 'playoffs' que definen al campeón. Hay que recordar que los dueños del Liverpool y del United son estadounidenses.
La noticia llega en un momento de tensión en el fútbol inglés después de que Liverpool y United encabezaran una propuesta para reestructurar el balompié británico aportando más dinero a los clubes modestos a cambio de que ellos, junto a los otros cuatro colosos de la Premier League, tuviesen más poder.