Iñigo: "Para dar ese 'salto' hace falta personalidad y a mi me sobra"

Iñigo Martínez cumple este miércoles, 30 de enero, un año como león. El central de Ondarroa llegó al Athletic Club el penúltimo día del mercado de invierno del 2018, después de que el club rojiblanco depositar los 32 millones de la cláusula de rescisión con los que la Real Sociedad había blindado al jugador.

Este sábado retorna a Anoeta, donde el recibimiento para él es más que hostil, ya lo ha catado. Algo que asume sin problemas, porque, según ha declarado en Onda Vasca, "para dar el salto que yo di hace falta valor y personalidad, y eso me sobra a mi o a Joseba Etxeberria".

"Estoy muy tranquilo, sé lo que debo hacer en cada momento, llevo la semana muy bien, es una gran ocasión de ganar el derbi allí y salir de zonas peligrosas, es un partido muy importante y, además, hay ganas de revancha tras el duro golpe del 1-3 de la ida en San Mamés. Esperemos traernos la victoria", deseaba.

Presión por el dineral pagado

"La presión ahí está, siempre va a estar... yo sabía que tenía que dar todo lo que tenía al fichar por el Athletic. Si pagan tanto es por algo también, pero es un reto que asumes y vine con toda la ilusión y muchas ganas, a darlo todo por el equipo y el Club, que se lo merecen, en cada partido".

Racha sin ganar

"Uno ya empieza a darle vueltas a la cabeza, (risas) que tenemos muchos tiempo para eso, no llegaba la victoria pero sabía que era una racha,... el fútbol es un mundo de altibajos, pero ya hemos salido de ahí. Vemos ya otro Athletic, con otras sensaciones en el vestuario y en la grada, y eso lo palpamos. Haciendo cuatro cosas bien, estando unidos, vemos que funciona, espero que siga valiendo esa fórmula para vernos arriba en la tabla".

Gran momento personal

"Es uno de mis mejores momentos, me siento más arropado, no yo, todo el equipo y los resultados ayudan a seguir adelante peleando,... con Gaizka el equipo da otra sensación, es otro Athletic. Es el que quiere la afición, el Athletic que pelea, el que se deja todo, es distinto al de antes. Para mi hay una gran plantilla, con gente que nunca se arruga y eso hay que valorarlo, creo que todavía el año puede ser bonito, hay tiempo".

Obligado a madurar deprisa

"Estar fuera de casa te obliga a madurar, además hay que saber llevar palos en momentos difíciles siendo joven, y mentalmente los futbolistas solemos ser fuertes. Si mentalmente no eres así te quedas en el camino, les pasa a muchos jugadores. Eso es un trabajo de técnicos de categorías inferiores y familiares, que son los que realmente te enseñan", expresaba.

Ambiente de San Mamés

"No es fácil describir lo que se vive abajo, pero me gustaría hacérselo saber a la afición: es vital para el equipo verles animar, levantarnos el ánimo cuando estás cansado y el rival te achucha. Fue espectacular ver así a San Mamés ante el Betis", agradecía en el micrófono.