Los cachorros que vienen pisando fuerte

El Athletic Club siempre ha destacado por tener una gran cantera de la que han salido multitud de jóvenes talentosos. En los últimos años han sido varios los cachorros que han dado el salto a la primera plantilla. Yeray, Unai Núñez, Unai Simón, Guruzeta o Nolaskoain son algunos de ellos. De cara a la próxima campaña otro puñado de futbolistas están haciendo méritos para tener una oportunidad en Primera.

Dani Vivian (1999). Antiguo "aprendiz" de Ibai Gómez en el Santutxu. Calificado como una auténtica esponja, por su capacidad y sus ganas de aprender. No es muy alto, hecho que compensa con su intensidad. Pegajoso en la marca y con buena salida de balón.

Unai Vencedor (2000). El cerrojo del filial. Un pivote defensivo que también puede actuar como interior. Muy intenso y con una enorme capacidad de trabajo que ayuda mucho al equipo. Sabe donde colocarse para cerrar los agujeros que se creen, además de tener una buen visión de juego y buen toque de balón para acertar en sus pases.

Oihan Sancet (2000). Una de las perlas de Lezama. Viene trabajando con el primer equipo desde el verano. Una grave lesión de rodilla le ha frenado en este curso. A pesar de ello, es un jugador con condiciones como para acabar siendo importante en el primer equipo. Buen toque de balón y capacidad para aparecer por todo el centro del campo. Su elegante conducción le permite superar líneas con relativa facilidad.

Gaizka Larrazabal (1997). Su temporada está siendo excelente. Nueve goles en 24 partidos, dos de ellos en el derbi ante la Real Sociedad B. Rápido, potente y con buen disparo. Quizás vive demasiado de su excepcional físico, pero sabe qué hacer con el balón en los pies. El Athletic Club no anda sobrado de extremos como él.

Iñigo Vicente (1998). El mayor talento que tiene el Bilbao Athletic ahora mismo. Es un atacante con magia, capaz de hacer cosas que nadie imagina. Su calidad le permite eliminar rivales con facilidad cuando conduce el esférico, además de disponer de una serie de recursos técnico que le hacen ser muy desequilibrante. Tiene gol y sabe asociarse con sus compañeros para regalarles asistencias. Debe trabajar su físico y sus conceptos defensivos, aunque viene mejorando en este aspecto.