Capa hizo de dios del trueno en San Mamés

Ahora que uno ya no sabe si es mayor tradición ir a votar o jugar a las dos de la tarde... se mantiene la de la media inglesa. La jugosa dieta de empatar fuera y ganar en casa que te suele enviar a Europa. Hoy debió cumplirse desde el principio, pero el Athletic Club sufrió con el Levante UD en la jornada 13 de LaLiga Santander. ¿Sería por lo del día gafe? Los leones merecieron su segundo triunfo consecutivo en San Mamés, para llegar al parón con esos 20 puntos que se pedían. Con suspense pero se ganaba (2-1) con goles de Postigo, Iker Muniain y un Ander Capa mitológico. Asistencia y gol hoy para el 'Mustang' de Portugalete.

La peor entrada de la temporada, con 33.202 espectadores, los truenos, la lluvia, el calamitoso arbitraje,... no taparon un partido intenso. Precioso para mi. En el que los leones casi cumplieron con aquello de 'el que perdona'... Pudieron encarrilar, les pillaron en un balón parado, y luego hubo que morir para empatar y ganar los tres puntos. Eso sí, ¡qué golazo! Iba todo el alma de Bizkaia en ese chut del jarrillero. El equipo se va sexto a comer y a la siesta. Ha sido una exhibición de fe y de empuje.

Gaizka Garitano también es de tradiciones

El míster, que recuperaba a Unai López para el centro del campo, retomaba la variante de Raúl García como delantero, Muniain por detrás con Williams en banda. Buen plan, aunque el derioztarra es de ideas generalmente fijas. De hecho, como recordaba la Adurizpedia, por primera vez en cuatro años el Athletic repitió once en un póker de jornadas de una misma Liga (la 3, 4, 11 y 13).

El Levante de Paco López llegaba tras dos sonados triunfos ante Real Sociedad y FC Barcelona. Pero de entrada fue ampliamente superado con un Williams voraz en su ala derecha. Era la consigna, buscar los costados ante un equipo muy cerradito por dentro. En una de esas cabalgadas de Willy el 'presidente suplente de Mesa' Aitor Fernández tuvo que sacar a córner un disparo de Iker Muniain y luego un cabezazo de Yuri Berchiche. Eran las primeras claras en mitad del sonido (literal) de los truenos sobre La Catedral.

En el 14' el de la Txantrea, con mucha chispa, volvió a buscar portería con un golpeo desde el lado izquierdo, parecido al que enchufaba al RCD Espanyol. Eran grandes momentos, en los que también un incisivo Unai López probó fortuna. Había poco público, diluviaba, pero por los cánticos la gente (valiente) se lo estaba pasando muy bien viendo a un equipo arrollador. Seis remates en un cuarto de hora (61% de posesión) lo decían todo. Nadie se olía lo que iba a venir...

Se pide penalti a favor del Athletic

La polémica llegaba en el 20' con una caída en área de Iñigo Córdoba que el colegiado Alberola Rojas, tras oír al VAR por el pìnganillo, desdeñaba. Pues pareció bastante claro el penalti. Pese al cabreo del personal, el partido pareció enfriarse un poco, y es que el ritmo inicial había sido digno del despegue de un transbordador espacial. Y encima Yuri, que era uno de los mejores, se medio lesionaba inocentemente en un saque de banda, en el que con la humedad renacieron sus problemas de hombro. El de Zarautz, titán, volvió entre aplausos antes de ver un paradón de Aitor a Raúl García. El de Zizur hasta le felicitó. La Junta Electoral de Gipuzkoa nos estaba haciendo la puñeta con su 'libranza' porque las paraba todas.

Eso jorobaba, claro, pero el bajón máximo fue ver a Postigo marcar en el descuento del primer tiempo. Fue en un balón parado nefastamente defendido. Miramón le gana la acción a Córdoba para luego darle ventaja a los granotas tras 45 minutos en los que merecían ir un par de goles por debajo. Pero el fútbol es así, que decía Bujadin Boskov, la primera que tuvieron los valencianos fue para dentro entre las piernas de Unai Simón.

Todavía con el cabreo general en el cuerpo el extremo de Deusto se quedaba en el banquillo dando salida a Ibai Gómez. Mas lo primero que se notó es que no llegó el 0-2 de milagro merced a una buena parada de Simón. El ataque parecía fuera de juego claro, el línea principal se dio mutis, pero el portero de Murgia estuvo providencial. El choque estaba turbio, hacia falta un milagro casi para reaccionar... y llegó. Un balón que parecía se iba fuera de Yeray a Capa lo centraba el jarrillero con una fé que ni Rafa Nadal y lo enchufaba... ¡Muniain de cabeza! Qué golazo para establecer el empate.

El duelo se había abierto. Pero una falta de Dani al borde del área ofrecía la opción al temible Bardhi de chutar. Ya le hizo dos así a Kepa. San Mamés rugía... pero afortunadamente la sacó, muy mal, Campaña en vez del macedonio. Garitano reaccionaba metiendo a San José por Unai, un cambio para apuntalar un partido demasiado correcalles y de paso aprovechar su llegada. Lo cierto es que el Athletic generó pronto dos buenos cabezazos, a la vieja usanza, que sin embargo no encontraron portería.

Era un día para la épica. Como la carrera de Williams con un autopase de 20 metros que sacó una amarilla a la defensa. Es un purasangre. Como Capa, que hizo un partido tremendo, al igual que Yuri. Faltaba poner la guinda a su trabajo incansable. No llegaba, así que hasta Asier Villalibre tuvo unos minutos en busca del Dorado. Y lo encontró Ander Capa... ¡mamma mía qué obús! Al saque del sexto córner la rompió en el 87' con todo. Se cantó como si fuera una Champions.

Era la segunda remontada de este equipo desde la llegada de Garitano. Un día electoral en el que se pudo golear, pero esto es el Athletic, aquí sufrir va en la carnet. Pero qué bien sabe ganar. Quedémonos con eso.

Todos los resultados en https://resultados.eldesmarque.com