Claro que Unai López tiene gol: dos obras de arte en Lezama

Su doblete en Ipurua ante la SD Eibar ha puesto en el candelero al jugador del Athletic Club Unai López. El talentoso centrocampista de Rentería alegró la vida a los athleticzales y de paso a su técnico, Gaizka Garitano. El derioztarra pide siempre a los jugadores de segunda línea que den un paso al frente en materia goleadora y la labor de López ante los de Mendilibar no pudo ser más definitiva.

Un aspecto clave para dar pasos adelante en esta temporada, en la que Unai tiene un gran recorrido como '8' con pegada. Ya solía disparar en los partidos, pero por ejemplo entrenando en Lezama hace unos meses dejaba claro su potencial en la definición. De hecho es el quinto jugador de la actual plantilla del Athletic que ha hecho un doblete en un partido de LaLiga.

Menudo traje que le hizo el centrocampista a su buen amigo el portero navarro Jokin Ezkieta en un entrenamiento. Unai colgaba rápidamente en las redes sociales los dos golazos que le metió: uno por cada escuadra, desde fuera del área, al espigado cancerbero.

Aparte del vacile, ya que el guipuzcoano le comentaba eso de “por si te habías olvidado, Jokin“, los dos disparos son como para verlos de nuevo, disfrutarlos y degustarlos ya que son de una factura plástica impresionante.

Sumado al carro el central Yeray Álvarez metía un poco más el cuchillo en las bromas del resto de compañeros al elevar la apuesta: "No hueles una", le espetaba al joven meta llegado de las filas del FC Barcelona.

https://www.instagram.com/p/CBu08pBCgfO/?utm_source=ig_web_copy_link

La relación de Unai López con el gol

Ojalá pronto podamos volver a verle anotar en LaLiga Santander. Hasta ahora su único tanto lo hizo en una precisa falta en Pucela ante el Real Valladolid. Seguro que el cuerpo técnico estará muy agradecido, ya que Gaizka Garitano no se ha cansado de pedir a sus hombres que den un paso adelante en el aspecto realizador.

Desde luego como meta uno así Unai acaba volviendo a reeditar los viejos pañuelos que se veían hace décadas en San Mamés, aunque esta vez deberían ser virtuales o como mucho sacados en el sofá de casa.