Aún colean los altercados ocurridos en la capital vizcaína el pasado 3 de abril, día en que se disputó en La Cartuja de Sevilla la final de la Copa del Rey entre el Athletic Club de Bilbao y la Real Sociedad. El día de la final, la Ertzaintza estableció un dispositivo especial para prevenir incidentes y evitar las concentraciones de personas que pudieran incumplir la normativa sanitaria.
Pues bien, este martes 4 de mayo, en una comparecencia en la comisión, la concejala de Seguridad Ciudadana, Amaia Arregi, ha justificado el dispositivo policial que se organizó el pasado 3 de abril, cuando se produjeron graves incidentes en Bilbao en las horas previas al partido.
Arregi ha señalado que la Policía Municipal reforzó ese día su plantilla en un 60 por ciento y que fueron los mandos policiales los que decidieron el "repliegue" de la Ertzaintza tras una primera carga debido a la gran cantidad de gente que había en la zona de la calle Licenciado Poza.
"Se actuó de forma proporcionada y moderada y la decisión en su momento no es política, es de los mandos", ha manifestado tras recordar que la investigación sigue abierta con 5 detenidos, 5 imputados y otros 2 identificados por participar en los altercados tras visionar 24 vídeos, muchos de ellos aportados por vecinos.
Por su parte, el concejal del PP Carlos García ha atribuido los incidentes a las juventudes de la izquierda abertzale y grupos radicales del Athletic y ha pedido que los padres de los menores implicados "paguen hasta el último céntimo" de los daños causados.
Ese día se recibieron numerosas llamadas de vecinos informando de que en la calle Licenciado Poza de Bilbao había multitud de personas que no respetaban las medidas anticovid.
Por este motivo, los recursos policiales trataron de acceder a la zona para normalizar la situación y fueron recibidos por un grupo numeroso de personas que les arrojaron objetos contundentes tales como botellas, piedras, al tiempo que cruzaban y daban fuego a varios contenedores, según ha recordado Seguridad.
Como consecuencia de estos actos vandálicos, además de los daños causados en el mobiliario urbano, varios vehículos particulares y un establecimiento comercial resultaron afectados. Asimismo, una mujer tuvo que ser trasladada a un centro sanitario para ser atendida de las lesiones sufridas en la cabeza por el impacto de una botella de vidrio.
Tras finalizar los incidentes, la Ertzaintza inició las investigaciones tendentes a identificar a los participantes.
Que paguen los padres??? Que fácil, que paguen ellos!! Con trabajos sociales o lo que sea.