2-0, Villalibre (min. 68)
3-0, Iñaki Williams (min. 90+3')
La hora de comer ya no se le atraganta al Athletic
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Uno por uno del Athletic: aprobado general por el décimo aniversario de San Mamés
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Este Athletic y el del curso pasado, idénticos para Valverde: "No veo un equipo muy diferente"
El Nuevo San Mamés celebraba este sábado su décimo aniversario con un encuentro frente al rival que la temporada pasada mejor se le dio al Athletic de Valverde: el Cádiz CF. Ironías del destino, lo hacía en un horario que, históricamente, se le ha dado bastante mal al equipo rojiblanco: las 14.00: la hora de comer. O la del aperitivo, si es que son de los que comen tarde.
Y es que, tirando de memoria, siempre que el Athletic ha tenido matinée en San Mamés ha acabado ofreciendo auténticos esperpentos. El último hace no tantos meses, frente a un Girona que desarboló por completo a los leones y ofreció un auténtico recital de fútbol ofensivo. Pero puedo irme más atrás en el tiempo y recordar un agónico partido frente al Getafe de Bordalás, todavía con Berizzo en el banquillo, que Peru Nolaskoain salvó con un gran gol de cabeza.
Siendo honestos, el partido de este sábado tenía toda la pinta de que podría convertirse en el enésimo tostón de media mañana que se comían los presentes en San Mamés. Un correoso Cádiz realizó un auténtico ejercicio de resistencia para sostener las acometidas del Athletic, que parecía reencontrarse con la mala fortuna del curso pasado cuando Sancet se topó con el larguero en dos ocasiones. O cuando Iza Carcelén salvó entre los palos un remate de Guruzeta.
¿Tanto ha cambiado este Athletic?
Como reza el dicho, el que la sigue la consigue. Y superada la hora de partido las fuerzas empezaron a flaquear para el equipo de Sergio González. Ahí es donde emergió un Gorka Guruzeta que, tras estar todo el partido jugando de diez, hizo las veces de nueve para cabecear un gran centro de De Marcos tras zafarse de la zaga cadista.
El mal fario con el gol se dio por acabado cuando Asier Villalibre marcó de rebote. Lo nunca visto en este Athletic que tanto le cuesta marcar gol. Y por si fuera poco, Iñaki Williams se unió a la fiesta tras una segunda parte en la que no paró de percutir por su banda después de desgastar a Fali, que le marcó de manera sobresaliente durante la primera mitad. Tres goles como tres soles y otra semana más durmiendo en Europa.
Claro, con tanta efectividad de cara a puerta, uno no puede olvidarse de lo que sucedió en el último tramo de la temporada pasada, cuando los rojiblancos llegaban y llegaban a puerta, pero no conseguían ver puerta... Hasta que el rival lo lograba en un par de aproximaciones.
En rueda de prensa, Ernesto Valverde levantó la liebre: no ve tantas diferencias entre este Athletic y el del año pasado. Y, siendo honesto, el único cambio que veo es que ahora parece que la mira está algo más calibrada y que hay más puntería. Veremos cuánto dura y si a los rojiblancos les da para alcanzar Europa.
Una semana más acostados en Europa y una semana acostados (los periodistas) acostados en la prudencia de la desconfianza. Valverde trató de reivindicarse diciendo, como siempre, que nada es tan malo ni tan bueno. El rey de los grises, como muchas de sus exposiciones fotográficas. No levantó la liebre, no...