Las últimas imágenes del Estadio Vicente Calderón: fase final del derribo

El Estadio Vicente Calderón vive sus últimos días. Más de un año después de que comenzara su derribo, el viejo estadio del Atlético de Madrid sigue cayendo piedra a piedra a orillas del Manzanares, tapado en la zona más cerca al recinto para que el polvo y los desprendimientos no acaben en las aguas del río. Ya han pasado casi tres años desde que se el equipo rojiblanco jugara allí su último partido, pero la fachada de la tribuna principal aún sigue en pie.

Y es que quien pase por Madrid Río puede presenciar la espectacular cristalera azul en todo su esplendor. También se se ven las vigas que sostenían una visera que, por contra, ya ha sido desmontada. Eso sí, en cuanto uno se acerca a cualquiera de las dos esquinas, ya sea a la del Fondo Sur o la del Fondo Norte, se da cuenta de manera instantánea de que aquello ya no es un estadio, sino una simple fachada.

El Estadio Vicente Calderón, un año para ser derribado

El derribo comenzó precisamente en el mes de marzo del año 2019. Primero, la grada baja de Lateral, siguiendo hacia el Fondo Sur. Poco a poco fueron cayendo el primer y segundo anfiteatro hasta acabar con la fachada exterior de estas dos gradas y la de Fondo Norte, finalizando así la primera fase del derribo. Una fase que concluyó con el desvío de la M-30 y con toda la tribuna en pie para desviar la carretera por donde hasta hace unos meses estaba el césped.

El derribo de dicha tribuna está siendo especialmente laborioso debido a tres factores claves. El primero, el hecho de que el Río Manzanares esté justo al otro lado de la fachada principal, lo que dificulta las maniobras de las máquinas. El segundo, que la M-30 pasa por debajo del estadio, aunque ya está desviada. Y el tercero, que se trata de la única grada que tenía una visera, que fue desmontada poco a poco hasta dejarla en nada.

Curiosamente, esta grada del Estadio Vicente Calderón fue la última en inaugurarse, en 1972 y casi seis años después de que se jugara allí el primer partido de su historia. Casi 50 años después, será también la última en venirse abajo y dejar paso a un solar y la construcción de viviendas. Unas viviendas que, por cierto, tienen prioridad para adquirir los socios del Atlético de Madrid.