El Atlético de Madrid tendrá que tomar una decisión en breves. Diego Pablo Simeone, entrenador del conjunto rojiblanco, debe consensuar con la dirección deportiva del club madrileño si Antonio Adán merece una renovación de su contrato. El cancerbero, a la sombra de un incomensurable Jan Oblak, finaliza contrato el próximo 30 de junio (a expensas de las modificaciones que pueda haber en este aspecto) y no está nada clara su continuidad.
Es por ello que son ya algunos los porteros que comienzan a ser vinculados con el cuadro rojiblanco. Entre ellos circula el nombre del portugués José Sá. Portero del Olympiacos y representado por Jorge Mendes, es uno de los nombres que el popular agente mueve en el mercado y el cuadro rojiblanco tiene en su agenda.
El guardameta ha sido cuestionado por el presunto interés del Atlético de Madrid en su fichaje en una entrevista concedida a Remate Digital. "No sé nada de eso. Son eso, noticias... Obviamente me alegra. Siempre es bueno que hablen de uno y reconozcan tu trabajo. Mis objetivos para las próximas temporadas son crecer y evolucionar. Quiero competir siempre con los mejores”, señaló.
Antonio Adán aterrizó en el Atlético de Madrid en verano de 2018 procedente del Betis. En el Villamarín estuvo cinco temporadas y allí se convirtió en una figura fundamental del equipo. Su llegada al cuadro rojiblanco, por contra, tenía un papel marcado: llegaba con el rol de meta suplente, experimentado y que, en caso de lesión de Oblak, aportara garantías.
En su llegada, Adán firmó por dos temporadas, por lo que acaba contrato al final del presente curso, cuando ya tendrá 33 años. En estos dos años apenas ha disputado siete partidos con la camiseta del Atlético, con un pobre bagaje de dos victorias, tres empates y dos derrotas. Su futuro está en el aire, aunque no está descartada la opción de que el club pueda ofrecer una renovación por un año más.