Se recorre 23.000 kilómetros en seis días y vuelve al Atlético sin jugar ni un minuto, lo han vuelto a hacer
El parón de selecciones, como casi siempre, ha dejado sensaciones contradictorias en el Atlético de Madrid. En el aspecto negativo, jugadores que vuelven lesionados como es el caso de Memphis Depay... y otros que se hacen cerca de 23.000 kilómetros para finalmente no disputar ni un solo minuto.
Ese ha sido el caso una vez más de Ángel Correa, que se ha marchado con Argentina para no jugar. Dos partidos amistosos en los que el atacante no ha tenido ninguna oportunidad, ni en Buenos Aires ante Panamá (2-0) primero ni en la goleada ante Curazao (7-0) en la ciudad de Santiago del Estero.
Ya le pasó algo similar en Qatar, aunque en aquella ocasión sí que llegó a gozar de unos minutos en el duelo de semifinales, cuando el partido ya estaba decidido. En cualquier caso, Correa volverá tan contento, pues Argentina se ha dedicado estos días a festejar el triunfo del Mundial y a darse un baño de masas con su hinchada, siempre pasional.
Ahora regresará al Atlético con 23.000 kilómetros a las espaldas. Cansado por tanto viaje, pero descansado en términos futbolísticos y, lo que es más importante, sin lesión de por medio. La posible baja de Depay ante el Betis la abre la puerta de un once en el que ha perdido protagonismo en las últimas semanas y en el que Griezmann y Morata llegan tras haber acumulado minutos con sus selecciones.