Jornada frenética para reforzar la delantera
A ningún cadista se le escapa que la gran asignatura pendiente en la confección de la nueva plantilla del Cádiz es la llegada de un delantero. El rendimiento de Mario Barco está siendo interesante, pero el club trabaja en un fichaje que se está resistiendo.
Desde que comenzaran las gestiones con Alfredo Ortuño a principios de verano no ha parado el trabajo de Juan Carlos Cordero con la intención de encontrar ese goleador que faltó la pasada campaña.
Por cuestiones económicas no llegó el atacante murciano ni tampoco otro que gustaba mucho como Joselu. Ahora las miras se centran principalmente en el mercado extranjero, pero no está resultando sencillo cerrar acuerdos con los jugadores mejor posiciones en al agenda de Cordero.
Paralelamente van llegando ofrecimientos de jugadores que un primer momento no eran especialmente interesantes, pero que ahora se empiezan a valorar. Es el caso de Dejan Lekic, delantero serbio que puede quedar libre en el Reus por los problemas económicos de la entidad catalana y que encaja en lo que busca el Cádiz. Ni que decir tiene que no es una primera opción, pero no se puede descartar en este momento.
Además se da la circunstancia de que el Cádiz cuenta en sus filas con Carrillo y Dani Romera, dos atacantes llegados la pasada campaña y que tienen contrato en vigor. Para que entre algún delantero debe producirse una salida y ninguna parece cercana a un día para que se cierre el mercado. El Almería no paga por Romera lo que pide el Cádiz y hay mutismo sobre las ofertas de Carrillo.
Las posibles salidas de Carrillo y Romera condicionan también las llegadas de fichajes
En las próximas horas aparecerán muchos nombres de ofrecimientos, algunos filtrados interesadamente por sus agentes, y hay que confiar en que Juan Carlos Cordero acierte en una posición que puede marcar el devenir del equipo. La pasada campaña ya quedó demostrado que con trabajo y sin gol es muy complicado llegar a grandes cotas.
