Poco premio para el que más lo buscó

Sólo pudo empatar el Cádiz contra el Málaga en un partido en el que puso más empeño para llevarse los tres puntos. Regaló un gol a su oponente en el arranque del partido y después lo dio todo, pero acabó el encuentro sin el fuelle habitual.

El Cádiz quería enseñar las uñas desde un primer momento con una presión alta que dificultaba mucho las cosas a su oponente. Eso le permitía robar y salir a la contra, el ABC de Cervera. Aketxe dio el primer susto con una falta que salió por encima de la portería en el minuto tres. Como no podía ser de otra manera, el equipo había salido muy enchufado.

Pero los errores se pagan muy caros y un córner pésimamente sacado por Aketxe terminó en gol del Málaga en la contra. Cifuentes detuvo el primer disparo, pero dejó el balón muerto y N'Diaye marcó a placer en el minuto siete.

Había que resetearse, pero fue un mazazo fuerte porque el rival no había hecho mérito alguno para ponerse por delante. El plan inicial era dejar que el Málaga tuviera el balón y después del gol ya esa idea no parecía tan adecuada. El público se ponía nervioso al ver que el Cádiz no se atrevía a presionar arriba y que el Málaga tenía la pelota más tiempo de lo recomendable con 0-1 en el marcador.

Pero el fútbol es imprevisible y, como dicen los cursis, el Cádiz también encontró el gol antes que el juego. Una falta al borde del área la convirtió en un golazo en el minuto 23 Aketxe, que se pudo redimir de su gran error en el córner que dio pie al tanto malaguista.

El Cádiz se vino arriba y recuperó la confianza que había perdido por momentos, pero no cambió nada en el dibujo ni en la disposición del equipo. Jairo se mataba a correr entre por detrás de Barco, que había sido la novedad en el once inicial y que en el primer tiempo no justificó en absoluto la apuesta de Cervera por él.

El peligro lo creaba el Cádiz con sus salidas vertiginosas a la contra, pero fue una primera mitad sin ocasiones claras. Mucha posesión estéril del Málaga y la sensación de que el equipo amarillo podía aspirar a más si cambiaba de marcha. Jairo pudo marcar el segundo antes del descanso tras una jugada de Machis por la izquierda y una dejada de Barco, pero Munir repelió su zurdazo.

El jugador cedido por el Girona marcó en el inicio de la segunda mitad, pero el gol fue anulado por fuera de juego. En esos primeros momentos tras la reanudación parecía que nadie quería arriesgar más de la cuenta. Mario Barco había mejorado y era capaz de aportar al equipo intensidad y juego de espaldas.

Pasaban los minutos y había mucha tensión por lo que había en juego. Realmente pasaban pocas cosas porque los unos anulaban a los otros, pero era el Cádiz el que parecía poner más interés en ir a por la portería del rival. Jovanovic, que entró por Barco, tuvo una buena ocasión en el minuto 66 después de un buen servicio de Matos, pero el balón se le marchó alto.

En el tramo final no se registraron ocasiones claras, sólo algunas llegadas al área sobre todo por parte de los locales. Un empate que sabe a poco, pero que hay que valorar por ser quien es el rival.