El Cádiz CF se ha asegurado la continuidad de Jon Ander Garrido por tres temporadas más. El club ha llegado a un acuerdo con el centrocampista vasco en pocos días, después de haber iniciado las conversaciones hace relativamente poco. Las dos partes querían seguir y las diferencias iniciales se han salvado finalmente.
Es una operación muy interesante para el club porque consigue atar a un futbolista que, a sus 30 años recién cumplidos, está en su plena madurez y es un jugador fundamental para Álvaro Cervera. En un equipo que apuesta por la solidez defensiva, el concurso del vasco es vital por el equilibrio y la seguridad que aporta en el centro del campo.
Garrido llegó al equipo amarillo en 2014 procedente del Barakaldo y, tras dos campañas completas, jugó la primera vuelta de la temporada 2015/16 en el Cádiz y la segunda, tras el mercado de fichajes invernal, cedido en el Racing de Ferrol. Después del ascenso del equipo amarillo a LaLiga SmartBank, el mediocentro se convirtió en un jugador fijo para Álvaro Cervera y en la presente campaña está encontrando la regularidad que le faltó en la anterior por las lesiones.
En este momento se encuentra recuperándose de una lesión en la mano derecha y es duda para el encuentro del viernes en Albacete, pero se le conoce por su pundonor y por un carisma que se puede considerar puro ADN del equipo cadista.